por admin » Vie Dic 30, 2011 7:59 am
SPANISHDECEMBER 29, 2011, 4:57 P.M. ET.Fidelity hace trampa para consultar al "Oráculo", pero a Warren Buffett no le hace gracia
Por SERENA NG
Hay pocos premios más codiciados por los inversionistas que la oportunidad de hacerle una pregunta a Warren Buffett durante la asamblea anual de accionistas de Berkshire Hathaway. Este año, sin embargo, Fidelity Investments misteriosamente acaparó las consultas.
No fue ninguna coincidencia y el legendario inversionista, conocido como el oráculo de Omaha, no está nada de contento y ahora busca evitar que vuelva a ocurrir. "No cabe duda de que hallaron una forma de burlar el sistema", dice Buffett, quien añade que la estrategia de Fidelity no encaja "en el espíritu de la reunión".
Buffett advierte que está planeando cambios en el formato que dará a conocer antes del próximo encuentro, fijado para el 5 de mayo.
Warren Buffett, en la reunión de accionistas de este año.
.Durante años, miles de personas han acudido a Omaha, Nebraska, para asistir a la asamblea anual de accionistas de Berkshire Hathaway Inc. Es una de las pocas ocasiones en las que pueden escuchar las opiniones de Buffett, presidente del conglomerado de inversiones, quien no es partidario de las conferencias ni las reuniones con analistas e inversionistas. En los últimos años, la asistencia ha sobrepasado las 30.000 personas, en lo que se ha denominado el Woodstock de los capitalistas. En la reunión, Buffett responde unas 50 preguntas de la audiencia.
Hace tres años, Buffett intentó poner punto final a las carreras para acceder al micrófono y estableció una serie de reglas para escoger las consultas de manera aleatoria, Berkshire realizó sorteos junto a cada uno de los 13 micrófonos instalados en distintas partes del auditorio. Los accionistas también podían dirigir sus preguntas a un grupo de periodistas que se turnaría con el público para hacerlas.
Fidelity, uno de los mayores accionistas externos de Berkshire, habitualmente envía a un contingente importante al evento. El viaje es considerado como una experiencia de aprendizaje para los analistas más jóvenes e incluso para los gestores fogueados, dicen fuentes cercanas.
A Fidelity, sin embargo, le irritaba el pobre nivel de algunas preguntas, que a menudo giran en torno a los hábitos personales de Buffett, sus libros favoritos y sus consejos para los estudiantes. A otros les exasperaban las infructuosas carreras para llegar primero a los micrófonos que caracterizaban al viejo sistema.
Tras la introducción del sistema de las rifas, un grupo de analistas y gestores de fondos de Fidelity empezaron a tramar un plan para hacerle más preguntas a Buffett. En 2010, trataron de aumentar las probabilidades al hacer que muchas personas participaran en los sorteos. La campaña tuvo un éxito moderado, de modo que Fidelity comenzó a diseñar lo que se conoció internamente como una "versión mejorada" de la estrategia, indican fuentes cercanas.
Más de 40 representantes de Fidelity asistieron a la reunión de este año, repartiéndose por los 13 micrófonos y participando en los sorteos. Berkshire informó que entre 500 y 800 personas participaron en los sorteos.
Esta vez, el plan de Fidelity funcionó. Los representantes de la firma de Boston realizaron seis de las 27 preguntas que provinieron desde la audiencia, es decir más de una de cada cinco. Al igual que en las asambleas anteriores, los interrogadores sólo se identificaban con su nombre y lugar de residencia, sin mencionar a su empleador. Otras dos preguntas de Fidelity fueron hechas por los periodistas, con lo que la firma realizó ocho de las 54 preguntas que respondió el inversionista. Buffett no se enteró sino hasta después.
Una portavoz de Fidelity rehusó comentar sobre el episodio, pero afirmó que el objetivo de la compañía en la reunión de Berkshire es "hacer las preguntas adecuadas de modo de obtener la mejor información para analizar y evaluar la empresa". Fidelity posee cerca de US$4.000 millones en acciones de Berkshire, equivalente a una participación de 2%.
Para la reunión de 2012, Buffet ya decidió que un tercio menos de las preguntas vendrán de la audiencia, puesto que añadirá un panel de analistas de Wall Street. También asegura que "Berkshire tomará las medidas para asegurarse de que las preguntas del público se elijan en forma aleatoria".
Cualquiera que sea el sistema escogido por Berkshire, los ejecutivos de Fidelity ya prometen que tratarán de aprovechar al máximo sus oportunidades, dentro de las reglas. Buffett no los culpa. "A esa edad, yo podría haber hecho lo mismo", dice.