Arabia Saudita e Irak llevan a la OPEP a superar su propia cuota
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) produce casi un millón de barriles de petróleo por día por encima de la meta que el cartel se fijó la semana pasada. La mayor parte de ese exceso proviene de dos países: Arabia Saudita e Irak.
Irak bombeó alrededor de 3,8 millones de barriles al día en mayo, según un informe mensual de la OPEP; de mantenerse, este nivel podría establecer un récord nacional. Arabia Saudita reveló que produjo 10,3 millones de barriles diarios [en el mismo período], una cifra históricamente alta que supera en 600.000 barriles la producción del reino el año pasado, cuando decidió abandonar su habitual estrategia de defender los precios del crudo reduciendo la producción.
La OPEP dijo que sus 12 países miembros produjeron 30.980.000 de barriles diarios en mayo, su nivel más alto desde septiembre de 2012 y un aumento interanual de casi 4%. Arabia Saudita e Irak representan más de tres cuartas partes de ese crecimiento.
Las cifras ponen de manifiesto la ardua competencia por mercados entre los dos rivales tradicionales por el poder en Medio Oriente. Irak ha logrado avances en Asia y Arabia Saudita ha recuperado algunos mercados que había perdido en EE.UU. y China; además, refina crudo para consumo interno en las plantas de propiedad estatal.
Esta competencia se produce en el contexto de un mercado mundial saturado, que ha mantenido los precios de la energía, tanto para consumidores como para productores, en niveles históricamente bajos. El crecimiento explosivo de la producción estadounidense, liderado por empresas especializadas en la fracturación hidráulica de la roca de esquisto, agregó 2 millones de barriles de petróleo por encima de la actual demanda diaria mundial.
Esto ayudó a que en enero los precios colapsaran a menos de US$47 el barril desde el máximo de US$114 el barril a mediados del año pasado. La cotización se ha recuperado a más US$66 dólares en los últimos días, pero los líderes de la OPEP reconocieron en su reunión de la semana pasada que no esperan que el precio vuelva a US$100 en el futuro cercano.
La semana pasada, la OPEP acordó un objetivo de producción de 30 millones de barriles por día. El secretario general de la OPEP, Abdalla Salem El-Badri , llamó a ese objetivo un “indicador”, no un techo.
Arabia Saudita e Irak parecen dispuestos a mantener las bombas funcionando a pleno en los próximos meses. Ambos han indicado que sus estrategias de producción están en gran medida divorciadas del precio del petróleo.
Incluso si los precios cayeran a US$20 el barril, “no creemos que reduciríamos las exportaciones. Vamos a aumentar la producción”, dijo Falih Alamri, director general de la Organización del Estado Iraquí para la Comercialización de Petróleo, en una conferencia de petróleo de Irak en Londres.
Irak no tiene otra opción, manifestó el funcionario. El país les debe a inversionistas extranjeros que han inyectado miles de millones de dólares en sus yacimientos, dijo Alamri. Irak exporta 3,2 millones de barriles al día, pero quiere alcanzar un promedio de 3,3 millones de barriles diarios este año, agregó.
La producción podría llegar a 6 millones de barriles al día a finales de la década, dijo en un discurso leído en nombre del ministro de Petróleo de Irak, Adel Abdel Mahdi. Esto requeriría alrededor de US$10.000 millones en nuevas inversiones, dijo en otro discurso Gati Saadi Al-Jebouri, vicepresidente senior de Lukoil Overseas.
Arabia Saudita también tiene previsto aumentar su producción en las próximas semanas para generar la energía que consumirán millones de unidades de aire acondicionado y otros usos domésticos durante la festividad del Ramadán en julio. El reino también tiene que abastecer una nueva refinería con una capacidad de 400.000 barriles diarios en Yanbu, un puerto sobre el Mar Rojo.
“Creo que [Arabia Saudita] casi seguro superará los 10,5 millones de barriles diarios “, vaticinó Robin Mills, director de la consultora de Dubai Manaar Energy. “De lo contrario, tendrían que reducir las exportaciones”.
Una lógica similar se aplica a los planes de producción a largo plazo del país, dice John Hall, presidente de la consultora de energía Alfa Group, porque reducir la producción podría abrir la puerta para que esa cuota sea ocupada por productores ajenos a la OPEP. “Si la próxima vez recortan la producción, el precio subirá, pero a largo plazo también crecerá la producción de otras fuentes de crudo como EE.UU. y posiblemente Rusia”, observó.
En un comunicado de prensa divulgado esta semana, el Ministerio de Petróleo y Recursos Minerales de Arabia Saudita rechazó la opinión generalizada de que el aumento de la producción tiene como objetivo compensar la caída de los precios. El ministerio citó en cambio un aumento de la demanda global y “las necesidades de los clientes permanentes del reino” como las causas del incremento de la producción.
La demanda sigue siendo un comodín en el mercado petrolero.
En la reunión de la OPEP que tuvo lugar la semana pasada en Viena, el ministro de Petróleo saudita, Ali al-Naimi, indicó que espera que la demanda aumente y los suministros bajen, con lo que el mercado alcanzaría el equilibrio a finales de este año. Tal escenario tendería a empujar los precios al alza.
En su informe, la OPEP dijo que había señales que la caída de los precios del petróleo estaba impulsando la demanda en EE.UU., donde aumentaron las ventas de vehículos todoterreno —que consumen mucha gasolina— y camionetas. También hubo cifras positivas sobre la demanda en Europa y China, informó la OPEP.
“Es probable que el actual exceso de oferta en el mercado se reduzca en los próximos trimestres”, indicó el documento.
No está claro de dónde previene la demanda. Parte del petróleo que se vende está siendo almacenado para revenderlo más adelante a un precio superior. En los países industrializados, las reservas comerciales de petróleo aumentaron 2.776 millones de barriles en abril, el quinto mes consecutivo en alza, totalizando 30,8 millones de barriles, dijo la OPEP. Este nivel es más de 178 millones de barriles superior al del mismo período del año pasado.