Los teléfonos inteligentes le quitan terreno a las cámaras digitales de alta gama
La caída en las ventas de cámaras y lentes de alta gama está planteando una pregunta alarmante para empresas como Canon Inc. 7751.TO +1.45% y Nikon 7731.TO -1.04% Corp: ¿la proliferación de teléfonos inteligentes con cámaras y aplicaciones podría estar aplastando no sólo los modelos simples sino también los más sofisticados?
Este año, los envíos de "cámaras de lentes intercambiables" —modelos de alta gama que les permiten a los usuarios alternar distintos lentes en el mismo cuerpo de la cámara— están bajando de forma marcada tras años de crecimiento sólido. La mayoría son cámaras digitales réflex de un solo lente, o DSLR por sus siglas en inglés, los modelos de gran tamaño que usan los fotógrafos profesionales y los entusiastas de la fotografía. La firma de investigación IDC prevé que los envíos de esas cámaras caigan 9,1% a 17,4 millones de unidades desde 19,1 millones de unidades el año pasado.
Bloomberg News
Varios clientes prueban cámaras Canon en una tienda en Tokio.
En las últimas semanas, Canon y Nikon —dos de los mayores fabricantes mundiales de cámaras de alta gama— redujeron sus previsiones de ventas para el año fiscal que termina en marzo. El fabricante de lentes Tamron Co., considerado un indicador de tendencias del mercado, vendió 22% menos de lentes intercambiables en los primeros seis meses de este año frente al primer semestre de 2012, lo cual lo obligó a reducir sus perspectivas de ganancias la semana pasada.
No queda claro a qué obedece esta caída. Canon, Nikon y Tamron señalan una economía global débil y un exceso de inventario.
"Estamos observando cifras difíciles actualmente, pero no creo que dure para siempre", afirmó el director financiero de Nikon Junichi Itoh, en una conferencia sobre ganancias reciente. "Aún hay una demanda potencial, y creo que China es la clave".
Pero el ejemplo de Lie Fhung sugiere que además los gustos del consumidor podrían estar cambiando. La artista y diseñadora gráfica que vive en Hong Kong afirma que ahora rara vez usa la cámara Canon DSLR que compró hace cinco años. En cambio, Fhung, de 44 años, saca la mayor parte de sus fotos con un iPhone, y satisface su deseo de manipular las imágenes con una cantidad de aplicaciones para editar fotos.
Cuando completa el proceso de edición, sube sus imágenes directamente desde su teléfono a la aplicación para compartir fotos Instagram, donde tiene casi 1.600 seguidores. Fhung afirma que no tiene planes de reemplazar su Canon.
"Me gusta usar distintas aplicaciones para jugar con la textura de las fotos", dice. "Es mi pasatiempo".
Los fabricantes de cámaras argumentan que aunque los teléfonos inteligentes y los aparatos móviles afectaron las ventas de las cámaras baratas y compactas, los productos premium no deberían verse perjudicados, ya que ofrecen un nivel de control y calidad de imagen que los pequeños lentes y sensores de un teléfono inteligente no pueden replicar.
"Tomar fotos con teléfonos inteligentes y editarlas con aplicaciones es como cocinar con ingredientes baratos y muchos saborizantes artificiales", sostiene el vocero de Canon Takafumi Hongo. "Usar cámaras intercambiables es como comida cocinada a fuego lento con ingredientes naturales y genuinos".
Pero otros observadores del mercado afirman que hay señales de que la popularidad de los aparatos móviles podría estar erosionando las ventas del segmento "accesible" y económico de las cámaras de alta gama. Christopher Chute, un director de investigación de imágenes digitales de IDC, señala que está observando que algunos clientes están eligiendo gastar dinero en teléfonos inteligentes y tabletas en lugar de cámaras de buena calidad.
Los aficionados a las cámaras podrían continuar renovando sus equipos, pero la pérdida potencial de algunos clientes nuevos sería un problema serio para la industria, indica. A medida que más consumidores evalúan los aparatos según el software y cómo se conectan a Internet más que por el hardware, los beneficios de las cámaras de alta gama podrían volverse menos obvios, sostiene. "Al usar software, se puede literalmente crear efectos de distintos tipos de cámaras", dice Chute.
Algunos analistas sostienen que el impacto de los teléfonos inteligentes y las aplicaciones sobre las cámaras de alta gama es exagerado. "Cuando el mercado baja, la gente suele intentar encontrar motivos estructurales", afirma el analista de J.P. Morgan Hisashi Moriyama.
Los fabricantes de cámaras han planteado que la gente que se entusiasma con la fotografía a través de teléfonos inteligentes y aplicaciones luego podrían pasar a comprar mejores cámaras, a medida que profundizan en su hobby.
De todos modos, la visión pesimista de que los teléfonos inteligentes están perjudicando incluso a las cámaras de lentes intercambiables no desaparecerá a no ser que las ventas comiencen a repuntar con firmeza, según el analista de UBS Securities Ryosuke Katsura.
En agosto, Katsura rebajó sus previsiones para el mercado de cámaras digitales para este año y el próximo. No cree que los teléfonos inteligentes desbanquen solos a las cámaras, pero no descarta por completo la posibilidad. "La industria está en un punto de inflexión en este momento, así que no hay escenarios imposibles", dice.
—Hiroyuki Kachi y Kosaku Narioka en Tokio contribuyeron a este artículo.