por admin » Mié Dic 15, 2010 12:44 am
El alza de las ventas minoristas afianza la recuperación de EE.UU.
Por Sudeep Reddy y Rachel Dodes
Los estadounidenses están abriendo la billetera durante esta temporada de fin de año, impulsando las ventas minoristas a niveles que no se habían visto desde antes de la recesión.
El gasto minorista, que incluye comercios, concesionarios de vehículos, restaurantes y sitios en Internet, creció 0,8% en noviembre, con respecto al mes anterior, con fuertes alzas en los rubros de vestuario, automóviles, indumentaria deportiva y libros, informó el martes el Departamento de Comercio de Estados Unidos. Los resultados de octubre también fueron revisados al alza.
El incremento es notable si se compara con el año pasado. Las ventas subieron 7,8% en el trimestre que concluyó en noviembre con respecto a igual lapso de 2009. En su conjunto, las ventas minoristas alcanzaron su nivel más alto desde noviembre de 2007, un mes antes del comienzo de la recesión.
Las cifras sugieren que la recuperación de la economía estadounidense se afianza, puesto que el gasto de los consumidores representa el 70% de la demanda de la economía.
De hecho, muchos economistas revisaron significativamente al alza sus proyecciones de crecimiento para el cuarto trimestre, tras conocer la mejora de las ventas minoristas. "No destaparía la champaña, pero las cosas se ven mejor", aseveró Chris Christopher, de IHS Global Insight. "Había mucha demanda reprimida. Los consumidores se están sintiendo un poco más confiados", comentó.
.El alza de las ventas minoristas hizo que las acciones alcanzaran su nivel más alto en dos años. El Promedio Industrial Dow Jones subió 42 puntos el martes para llegar a 11.471 unidades, su mayor altura desde el inicio de la crisis financiera en septiembre de 2008.
La economía estadounidense, en todo caso, aún tiene un largo camino por delante.
El desempleo, por ejemplo, todavía bordea el 10% y la Reserva Federal (Fed) sigue adelante con su programa para invertir US$600.000 millones en la compra de bonos del Tesoro como parte de un esfuerzo para mantener bajas las tasas de largo plazo y estimular la economía.
De todas formas, el buen comienzo de la temporada navideña para la mayoría de los minoristas constituye la evidencia más reciente de una recuperación que se acelera. La Federación Nacional de Minoristas elevó su pronóstico de crecimiento en las ventas de fin de año en un punto porcentual a 3,3%.
El fortalecimiento de la demanda de los consumidores podría ser una inyección clave para fomentar el empleo.
La Federación Nacional de Empresas Independientes informó que su índice de la confianza de pequeñas empresas avanzó 1,5 puntos en noviembre hasta 93,2, su nivel más alto desde diciembre de 2007. A su vez, la Business Roundtable, organismo que reúne a los presidentes ejecutivos de las grandes compañías, anunció que el optimismo entre sus miembros ascendió a su mayor nivel desde comienzos de 2006.
El repunte de las ventas minoristas coincide, sin embargo, con presiones sobre los precios mayores a las esperadas, debido fundamentalmente al auge en la cotización de las materias primas. El gobierno estadounidense reportó el martes que el índice de precios mayoristas subió 0,8% en noviembre frente al mes anterior y 3,5% respecto al mismo mes del año pasado. Al excluir los volátiles precios de la energía y de los alimentos, el índice avanzó 0,3% frente al mes previo y 1,2% frente a un año atrás.
Las cifras indican que la inflación subyacente sigue baja en un momento en que la Fed decidió dejar su política monetaria sin cambios. El banco central explicó que "la recuperación económica continúa, aunque a un nivel que es insuficiente para abatir el desempleo".
"Nos sentimos un poco mejor", manifestó Mryon Ullman III, presidente ejecutivo de la cadena de multitiendas J.C.Penney Co., cuyas ventas en los locales abiertos hace por lo menos un año aumentaron 9,2% en noviembre.
Ullman explicó que los consumidores están gastando más en cosas para sí mismos, comprando artículos como utensilios de cocina y electrodomésticos, no sólo gastando en regalos de Navidad como en 2009.
Karolina Lieponis, una trabajadora social de 28 años en Chicago, cuenta que está "gastando un poco más" este año en ropa, electrónicos y regalos para su familia en parte debido a que la compañía en la que trabaja ofreció aumentos de sueldo este año.
Tim Belk, presidente ejecutivo de Belk Inc., que opera más de 300 tiendas por departamentos en el sur de EE.UU., señaló que los productos de precios más elevados, como las prendas de Polo Ralph Lauren Corp. y los accesorios de Coach Inc. también se están vendiendo más, una tendencia que consideró "un barómetro alentador pensando en el futuro".
Antes los consumidores se preguntaban si debían comprar algo o ahorrar el dinero, dice Belk. "Ahora empiezan a contemplar la posibilidad de más gasto discrecional", indicó.