BOJ mantiene curso de política, Kuroda evita criticar retraso en alza impuesto
Por Leika Kihara
TOKIO (Reuters) - El Banco de Japón mantuvo sin cambios su marco monetario y su visión económica optimista el miércoles, luego de unos datos que revelaron que la economía cayó en recesión, prefiriendo dejar que pase más tiempo para evaluar el efecto de su flexibilización sorpresiva del mes pasado.
El gobernador del Banco de Japón, Haruhiko Kuroda, evitó criticar la decisión del primer ministro, Shinzo Abe, el martes de retrasar un aumento del impuesto sobre las ventas que el banco central había apoyado como una medida necesaria para equilibrar el presupuesto.
Tal como se esperaba, el Banco de Japón (BOJ, por su sigla en inglés) votó a favor de continuar con sus compras de bonos soberanos y activos de riesgo, manteniendo su promesa de incrementar la base monetaria -o dinero en efectivo y depósitos en el banco central- a un ritmo anual de 80 billones de yenes (683.000 millones de dólares).
"La economía de Japón sigue recuperándose moderadamente como una tendencia, aunque algunas debilidades continúan principalmente en la producción", dijo el BOJ en un comunicado tras su reunión de política.
El banco central revisó al alza su punto de vista sobre las exportaciones para decir que son "planas", en comparación con la evaluación del mes pasado donde dijo que se estaban debilitando.
El miembro del directorio del BOJ Takahide Kiuchi, un escéptico del programa actual de estímulo, discrepó de la decisión de política en una muestra de su rechazo a la flexibilización monetaria del mes pasado que fue aprobada en una votación por un estrecho margen.
La reunión viene tras unos datos reportados el lunes que mostraron que la tercera economía más grande del mundo cayó inesperadamente en recesión en el tercer trimestre, ya que el impacto de un alza del impuesto sobre las ventas en abril contrarrestó la enorme inversión del BOJ y y el Gobierno.
El martes, el primer ministro dijo que iba a llamar a elecciones anticipadas para buscar un nuevo mandato que le permita consolidar sus políticas económicas, y pospuso un segundo aumento en el impuesto sobre las ventas de octubre del 2015 a abril del 2017.
Los pésimos datos del Producto Interno Bruto (PIB) del tercer trimestre complican los esfuerzos del BOJ, que buscó adelantarse a los riesgos para las perspectivas de inflación al ampliar el estímulo monetario el mes pasado.
Kuroda, que habló a la prensa después de la decisión del BOJ, se centró en la promesa de Abe de mantener el compromiso a largo plazo de Japón de reducir la carga de la deuda más pesada en el mundo industrial.
"Elevar el impuesto sobre las ventas es algo que el Gobierno y el Parlamento deciden, tomando en cuenta los aspectos económicos y otras condiciones", dijo Kuroda. "En términos generales, es importante para Japón, como nación, mantener la confianza del mercado en sus finanzas".
"El Gobierno ha establecido un plan de consolidación fiscal a mediano plazo y se ha fijado un objetivo claro (...) Esperamos que el Gobierno implemente medidas de manera constante, sobre la base de este plan, para crear una estructura fiscal sostenible", agregó.
(1 dólar = 117.0800 yenes japoneses)
(Reporte adicional de Stanley White, Tetsushi Kajimoto y Kaori Kaneko. Editado en español por Carlos Aliaga)