por admin » Mié May 05, 2010 3:45 pm
Los presidentes ejecutivos de EE.UU. ven un crecimiento de la economía para 2010
Por Sara Murray
Los líderes de las empresas en Estados Unidos tienen cada vez más confianza de que la economía del país experimentará un crecimiento sostenido durante el 2010, según una encuesta publicada el miércoles.
Alrededor del 70,4% de los presidentes ejecutivos de compañías espera que la economía estadounidense se expanda entre el 2,1% y el 3% este año, según un sondeo efectuado en mayo por el Business Council y The Conference Board. El porcentaje se compara con el 51% que manifestó la misma opinión en una encuesta de febrero.
Sin embargo, persisten las preocupaciones sobre si el crecimiento económico de Estados Unidos continuará el próximo año y si las recientes señales de un estancamiento en la recuperación económica europea pueden frenar la recuperación global.
El indicador general de la confianza empresarial en Estados Unidos ascendió a 66,6 en mayo, frente al de 64,7 en febrero y al de 50 en el mismo período del año pasado.
La percepción hacia las actuales condiciones económicas mejoró en la encuesta más reciente, pero las expectativas sobre la economía en los próximos seis meses permaneció sin cambios frente a febrero, una señal de que el aumento en la confianza de los líderes empresariales hacia la economía podría no extenderse más allá del 2010.
Los CEO también se mostraron más confiados sobre el ritmo del crecimiento económico en el extranjero, particularmente en Asia. El barómetro sobre las condiciones actuales de la economía mundial ascendió a 69,1 en mayo, frente a la lectura de 65,4 en febrero. Si bien el indicador ascendió para Asia, descendió para China y Europa. Las expectativas futuras se mantuvieron estables para Estados Unidos, se redujeron para China, Asia, Europa y para la economía mundial en general.
"La recuperación desde la crisis parece estar perdiendo impulso en Europa y ciertamente no será ayudada por las pérdidas comerciales y en el transporte experimentadas en semanas recientes", señaló el informe. En relación con China, el informe sostuvo que "existen preocupaciones anecdóticas sobre cómo los efectos en las políticas de préstamos, los precios de los bienes raíces y las políticas de competencia del gobierno están ejerciendo presión sobre el ambiente operativo de China", lo que podría haber propiciado un ligero descenso en la confianza.
Entre las señales positivas presentadas por los presidentes ejecutivos, casi la mitad dijo que sus compañías planean aumentar las inversiones de capital en el transcurso del próximo año y más del 60% espera un crecimiento más rápido en las ganancias este año. Entre los que pronostican un crecimiento en los beneficios, seis de 10 indicaron que este sería alimentado por el crecimiento en la demanda y el mercado. En tanto, el 28,3% indicó que procedería de la reducción de costos.
A pesar de la mejora en las expectativas del empleo, este sector continúa siendo el punto débil. Si bien es menor el número de compañías que planea reducir las contrataciones -cerca del 11%, comparado con el 18% del sondeo de febrero- las empresas aún están renuentes a crear empleos. La mayoría de los presidentes ejecutivos encuestados, el 72,2%, dijo que el ritmo de las nuevas contrataciones permanecería estable. La mayoría espera que la tasa de desempleo continúe en la aún alta banda del 9,1% al 9,5% en diciembre del 2010.
Las presiones inflacionarias, por su parte, podrían continuar siendo moderadas. El 47,2% de los encuestados proyecta una inflación básica del consumidor -que elimina los precios de la energía y los alimentos- de entre el 1,5% y el 1,9%.
En relación con la tasa interbancaria federal, la mayoría, el 47,2%, espera que ascienda a entre el 0,51% y el 1% para diciembre del 2010.
Los líderes empresariales consideran que el déficit presupuestario federal es el tema más difícil que enfrenta Estados Unidos. Cuando se les preguntó a los presidentes ejecutivos qué hacer para recortar el déficit, la opinión estuvo casi igualmente dividida entre quienes favorecen recortes en los gastos discrecionales no relacionados a la defensa, reducir los beneficios, excluidos los servicios médicos, y concentrarse más en la reducción de los costos del cuidado para la salud.
El sondeo tomó como base las respuestas de 73 miembros del consejo empresarial.