por admin » Lun Jun 04, 2018 1:34 pm
ANÁLISIS-Euroescépticos italianos y sus ideas pasan al centro de la escena
Por Giselda Vagnoni
La bandera italiana ondea sobre el Palacio Quirinal en Roma, Italia, el 30 de mayo de 2018. REUTERS / Tony Gentile
ROMA - Si Italia abandona el euro, será un viernes tarde por la noche.
Los funcionarios del gobierno habrán planeado la medida bajo el máximo secreto, contándoles a sus socios europeos solo esa misma noche, al tiempo que simultáneamente ordenan el cierre de los bancos y de los mercados financieros para impedir una estampida de capitales saliendo del país.
Este es el “Plan B de Italia”, un increíble escenario de contingencia elaborado por el equipo de un sitio web especializado en temas económicos, para la forma en que la tercera economía de la zona euro debería retornar a la lira, de ser necesario.
El panfleto de 80 páginas fue ignorado cuando se conoció por primera vez en octubre de 2015, y normalmente habría quedado así.
Pero luego, uno de los contribuyentes más conocidos del sitio web, el economista de 81 años de edad Paolo Savona, fue presentado el mes pasado como candidato para ministro de economía bajo la nueva coalición antisistema entre la derechista Liga y el Movimiento 5 Estrellas.
El gobierno forjado el jueves pasado posteriormente relegó a Savona al puesto menor de encargado de asuntos europeos, después de que el jefe de Estado se rehusó a permitir que un archi-euroescéptico ocupara el ministerio de economía, una posición clave.
Y dentro de la Liga, que predomina en las ricas regiones norteñas de Lombardía y Véneto, las fuentes dicen que no hay señales de ansiedad de que el líder Matteo Salvini se arriesgaría al caos de sacar el país de la moneda única.
No obstante, el “Plan B” sigue en la lista de la bibliografía obligatoria para quienes buscan comprender los fundamentos intelectuales de la nueva coalición.
Salvini en particular ha sido instrumental en sacar a Savona y varios otros economistas euroescépticos y sus ideas de la oscuridad intelectual para incorporarlos dentro del gabinete por primera vez, dijeron personas familiarizadas con la situación.
El nuevo ministro de economía, Giovanni Tria, profesor de economía de la Universidad Tor Vergata de Roma, no estuvo involucrado en delinear el “Plan B”, pero él tampoco es un fuerte defensor del euro.
El año pasado, escribió que “ni siquiera el presidente del Banco Central Europeo Mario Draghi tiene razón cuando dice que el euro ‘es irreversible’, a menos que aclare las condiciones y momentos de las reformas necesarias para salvar al euro”.
Sin embargo, el viernes por la noche dijo a Reuters que él “nunca dijo que Italia debe salir del euro”.
“En todo el bloque hay un debate sobre cómo reformar a Europa, y en Italia, también. No hay ninguna fuerza política en Italia que quiera salir del euro”, agregó.
“ESCLAVITUD” MONETARIA
Salvini ha citado el trabajo de pensadores euroescépticos para caracterizar la unión monetaria como una forma de “esclavitud” monetaria, una opinión no promovida por la Liga y sus partidarios de fuerte base empresarial hasta que se convirtió en su jefe en 2013.
“Los economistas euroescépticos han sido capaces de construir un consenso en las redes sociales. Gracias a Salvini, ahora han emergido de las sombras académicas”, dijo Riccardo Puglisi, un profesor de economía política de la Universidad de Pavia y uno de los críticos más resonantes de la idea de dejar el euro.
Otro economista que ha entrado al círculo intelectual de Salvini es Alberto Bagnai, quien ingresó al parlamento como senador por primera vez en las elecciones del 4 de marzo.
Profesor asociado de política económica de la Universidad Gabriele d’Annunzio, Bagnai publicó “Il tramonto dell’euro” (“El atardecer del euro”) en 2012, un libro considerado por Salvini como imprescindible en cualquier biblioteca.
En él, Bagnai describió al euro como un “monstruo económico” y a la canciller alemana Angela Merkel como “tan intransigente como un miembro de la Liga” por impulsar la austeridad en los países europeos golpeados por la recesión durante la crisis financiera global, en lugar de dejarlos gastar más para apuntalar la demanda doméstica.
En el centro del círculo euroescéptico de Salvini se encuentra el jefe de política económica de la Liga Claudio Borghi, un economista y exdirector gerente del alemán Deutsche Bank que, justo antes de las elecciones europeas de 2014, escribió “Basta euro”, la política del partido sobre la moneda única.
En él, Borghi sostenía que la moneda única europea inevitablemente terminaría y expresó su esperanza de que esto ocurriera más pronto que tarde.
Savona no respondió a pedidos de comentarios sobre la materia. Bagnai no comentó, y Borghi dijo que era un economista que provenía del mundo empresarial y no de la academia.
Reporte de Giselda Vagno