por RCHF » Vie Oct 28, 2011 12:20 pm
ACUERDOS LOGRADOS SE QUEDAN CORTOS
Europa busca ganar tiempo frente a su crisis financiera
Bancos aceptaron que sus acreencias con Grecia sean recortadas hasta en 50%. Mercados reaccionan al alza en todo el mundo y la bolsa de Lima subió ayer 3,4%. Falta definir muchos detalles para que acuerdo tenga credibilidad en el mediano plazo. Economía peruana no sentirá en próximos meses impacto de medidas adoptadas en Eurozona
Viernes 28 de Octubre del 2011
En una reunión que se extendió hasta pasadas las 4 a.m. de ayer en Bruselas (Bélgica), los líderes europeos finalmente se pusieron de acuerdo para ampliar el fondo de estabilidad europea de 440 mil millones de euros a más de un billón de euros (unos US$1,4 millones de millones), para poder respaldar a otros países en problemas potenciales de pago de deuda como Italia y España, mucho más grandes que Grecia, y mucho más caros de ayudar.
Además, en dicha cita los inversionistas tenedores de la deuda griega aceptaron cobrar tan solo el 50% de sus acreencias hasta el 2020, de manera que el stock de la deuda helénica se reduzca hasta un 120% de su PBI. Ello, en palabras del primer ministro de ese país, Georges Papandreou, “compra más tiempo” para Grecia.
Fuentes cercanas al presidente francés Nicolas Sarkozy informaron que este llamó por teléfono en la víspera a su homólogo chino, Hu Jintao, para pedir ayuda. Luego el propio Sarkozy lo confirmaría.
MERCADO DE FIESTA
En respuesta a todo ello (y a que la economía de EE.UU. creció inesperadamente 2,5% en el tercer trimestre del año), los mercados mundiales reaccionaron al alza, en uno de los ‘rallies’ más potentes que se recuerda. Bolsas (incluida la peruana, que se elevó un 3,46%), y mercados de monedas (ver nota al pie) y commodities de todo el globo subían respirando aliviados por las buenas noticias (ver cuadro).
Sin embargo, como explican varios especialistas en mercados, incluyendo al economista Carlos Zapata (especialista en mercado chino); el consultor de commodities del “Financial Times”, Jack Farchy, y hasta el presidente del Banco Central de Reserva del Perú, Julio Velarde, hay un componente especulativo muy grande en los precios y no sabemos con certeza de cuánto se trata.
“La tremenda volatilidad que hemos visto en los mercados en los últimos meses no puede simplemente ser explicada por fundamentos de oferta y demanda”, explicaba Bart Chilton, miembro de la Comisión de Comercialización de Futuros de Materias Primas del Gobierno de EE.UU., en una reunión del Banco Mundial hace algunas semanas.
La misma comisión advirtió en junio que la negociación diaria de futuros de petróleo sin fines de uso final (es decir, solo especulativos), rondaba el 90%. Y eso es lo que vimos ayer, cuando el petróleo subió hasta superar los US$93 por barril y el cobre avanzó más de 6% (ver cuadro).
¿DE DÓNDE?
Y no era para menos. El mercado esperaba que se llegara a un acuerdo semejante en la reunión del fin de semana pasado, la misma que terminó sin novedad y aún así las bolsas no reaccionaron a la baja. Después de todo, el mercado está ávido de buenas noticias y ayer, si estaba de humor, las cosas podrían verse bien.
Pero ¿es así realmente? ¿O sucede que en el fondo los europeos solo están comprando tiempo como reconoce Papandreou? Ser categórico al respecto puede parecer un poco arriesgado a estas alturas pero, la verdad sea dicha, en lo único en que se han puesto de acuerdo es en ampliar el fondo pero no se sabe cómo. No se ha explicado –ni mucho menos detallado– cómo será estructurado el financiamiento de dicha ampliación, ni qué es lo que se le deberá dar a los bancos a cambio de que renuncien al 50% de sus acreencias, ni si, en última instancia, el paquete aprobado a manera de buen deseo, será suficiente para asegurar que Italia y luego España no pasen por el brasero en el que está Grecia.
Pero además, como señalan el presidente de Eurointelligence y el editor asociado del “Financial Times”, Wolfgang Münchau, y el ex viceministro de Economía del Perú Eduardo Morón, aún está por verse si los bancos “entrarán” a este acuerdo voluntariamente. ¿Cómo así? Pues todos ellos están cubiertos por un seguro contra una cesación de pagos involuntaria, pero si ellos aceptan el recorte de la deuda, el seguro no se activa. Entonces, ¿cuál es el punto de tener un seguro?
En un escenario usual –usual dentro de lo inusual–, en un ‘default’ el inversionista recupera alrededor del 40% de su inversión. Sí es positivo, empero, que Grecia haya entrado en un ‘default’ controlado de 50% sin salir de la Unión Europea ni renunciar al euro, pero ¿por cuánto tiempo más?
Las respuestas que darán sostenibilidad a lo ocurrido ayer en los mercados deben provenir de la reunión de líderes europeos del próximo 3 de noviembre en Cannes, lo que “parece un plazo muy corto para terminar de detallar todos los puntos que faltan aclarar”, según comenta el economista jefe del BBVA, Hugo Perea.
Por último, se obligó a los bancos europeos a ampliar su capital en 9% para antes de julio del 2012, lo que significa que deberán conseguir unos 108.000 millones de euros vendiendo activos o ajustando el otorgamiento del crédito, lo que, en esencia, desincentivará el crecimiento económico que tanto necesita la región para solucionar sus problemas de deuda.
ANÁLISIS
Europa no sabe gobernar
Piensen en la Eurozona como un experimento de globalización circunscrito a un continente. Convencidos de que fundarían una economía plenamente integrada, en la cual capitales y personas se moverían a donde mejor pudiesen ser aprovechados, sus miembros olvidaron -o quizá no se atrevieron a ver- que tal nivel de integración no solo genera oportunidades para los negocios. De hecho, entraña riesgos altísimos si no se acompaña de un esfuerzo igualmente ambicioso de crear un verdadero sistema de gobernanza supranacional, que vaya mucho más allá de solo compartir una moneda.
Al margen de lo económico, la Eurozona no está integrada. Los ultranacionalismos que se creían acallados rebrotan con manifiesta intolerancia, en un continente que no se puede hablar a sí mismo por no hablar todos el mismo idioma. La soberanía estatal sigue siendo un obstáculo infranqueable para enfrentar un problema sistémico, que trasciende a las fronteras intrarregionales. Europa es, pues, una sumatoria de países que no se sabe gobernar y donde todos quieren vivir como los alemanes pero con la indisciplina de los griegos.
Y, como si eso fuera poco, afronta una de sus más severas crisis de liderazgo.
AUGUSTO TOWNSEND. EDITOR DE ECONOMÍA