La flotación del yuan probablemente impulse monedas asiáticas
Por Alex Frangos
HONG KONG (Dow Jones)--La postura más flexible de China frente al yuan probablemente dará un impulso a las monedas en Asia, al tiempo que reducirá las presiones sobre las tasas de interés asiáticas.
El won de Corea del Sur, el dólar australiano, el bath tailandés y el ringgit de Malasia podrían sentir los mayores efectos, a medida que los operadores e inversionistas acumulan monedas consideradas representantes del crecimiento de China y el potencial aumento de la demanda de bienes extranjeros gracias a la mayor solidez del yuan.
"Es posible que las mayores variaciones en las monedas se registren en el resto de Asia, no en China", afirmó Robert Subbaraman, economista de Nomura en Hong Kong.
En el corto plazo, la moneda china podría incluso debilitarse frente a las divisas de sus vecinos, donde se encuentran varios de sus principales rivales exportadores. Es probable que China tome medidas graduales para dejar que el yuan se fortalezca, mientras que otros países, con mercados de capital más abiertos, podrían observar una apreciación más rápida.
"China habrá generado un montón de titulares positivos incluso a medida que su moneda se debilita", sostuvo Sean Callow, estratega del mercado cambiario de Westpac Bank en Sydney.
Para muchos de los vecinos de China, la medida sobre el tipo de cambio del yuan podría ser un arma de doble filo. Por una parte, les otorgará flexibilidad para manejar sus políticas monetarias. El aumento en los flujos de ingreso de capital y la demanda de energía y otros bienes básicos han incrementado las presiones inflacionarias, pero los bancos centrales han sido reticentes a elevar las tasas de interés por temor a atraer incluso más capital y provocar un alza en el valor de sus monedas. Una apreciación de sus monedas hace que las exportaciones -un motor clave del crecimiento asiático- se vuelvan menos competitivas, particularmente frente a China, siempre y cuando su moneda estuviera paralizada frente al dólar.
Ahora, con la posible alza del yuan, los bancos centrales de países como Tailandia, Indonesia y Taiwán podrían sentirse más cómodos al dejar que sus monedas se fortalezcan. Eso, a su vez, puede ayudar a combatir las presiones inflacionarias debido a que una moneda más sólida hace más baratos los bienes importados y los bienes básicos, lo que reduce la necesidad de elevar las tasas de interés.
"Probablemente tenemos un poco más de tolerancia a una apreciación de la moneda", dijo Sanjay Mathur, economista para Asia de Royal Bank of Scotland en Singapur.
Pero al mismo tiempo, los países vecinos de China podrían tener que hacer frente el lunes a una ráfaga de capital que buscan ponerse al día con la medida sobre el yuan. La demanda de los inversionistas por monedas locales ejercerá más "presión sobre los bancos centrales para que intervengan y así impedir que las monedas se fortalezcan demasiado", dijo Peter Redward, titular de análisis de Asia emergente de Barclay's Capital en Singapur. "Lo que es bueno para China no es necesariamente bueno para el resto de Asia".