por Fenix » Sab Dic 07, 2013 7:56 pm
Las 13 cosas que evita la gente fuerte mentalmente
Viernes, 6 de Diciembre del 2013 - 20:42:00
En muchas ocasiones les he señalado que la fortaleza mental es fundamental a la hora de acercarse a los mercados financieros –de hecho es fundamental en cualquier orden de la vida. En otros artículos he traído a estas páginas consejos y herramientas para desarrollar la capacidad mental suficiente como para lidiar con la avaricia y el miedo entre los que oscilan los mercados, hoy sin embargo, les mostraré la lista que ha elaborado Amy Morin, especialista en comportamiento social, sobre la serie de actos que las personas fuertes mentalmente evitan a toda cosa:
1. Perder el tiempo sintiendo lástima de sí mismos. Usted no ve a las personas mentalmente fuertes sentir lástima por sus circunstancias o de la forma en qué están siendo maltratadas. Ellas han aprendido a asumir la responsabilidad de sus acciones y sus resultados, y tienen una comprensión inherente del hecho de que con frecuencia la vida no es justa. Son capaces de salir de circunstancias difíciles con la auto-conciencia y la gratitud por las lecciones aprendidas.
2. Regalar su energía: Las personas mentalmente fuertes evitan dar a otro el poder de hacerles sentir inferiores. Entienden que ellos tienen el control de sus acciones y emociones. Saben que su fuerza está en su capacidad para gestionar la forma en que responden.
3. Rehuir el cambio. Las personas mentalmente fuertes aceptan el cambio y dan la bienvenida al desafío. Su mayor "miedo", si lo tienen, no es lo desconocido, sino caer en la autocomplacencia y estancamiento. Un entorno de cambio e incluso de incertidumbre puede energizar una persona mentalmente fuerte y llevarlo a cabo lo mejor posible.
4. Malgastar energía en cosas que no pueden controlar. Las personas mentalmente fuertes no se quejan (mucho) por el mal tráfico, el equipaje perdido, o, especialmente, acerca de otras personas, ya que reconocen que todos estos factores están en general más allá de su control. En una mala situación, reconocen que la única cosa que siempre se puede controlar es su propia respuesta y actitud, y usan bien estos atributos.
5. Preocuparse por agradar a los demás. Una persona mentalmente fuerte se esfuerza por ser amable y justo y complacer a los demás en su caso, pero no tiene miedo de hablar. Ellos son capaces de soportar la posibilidad de que alguien se enoje y muestre su desacuerdo.
6. El miedo a tomar riesgos calculados. Una persona mentalmente fuerte está dispuesta a tomar riesgos calculados. Esto es una cosa totalmente diferente a saltar de cabeza tontamente a actos arriesgados. Con fuerza mental, un individuo puede sopesar los riesgos y beneficios a fondo, evaluando plenamente las desventajas potenciales e incluso los peores escenarios antes de tomar acción.
7. Vivir en el pasado. Hay fuerza en reconocer el pasado y, especialmente, en el reconocimiento de las cosas aprendidas - pero una persona mentalmente fuerte es capaz de evitar enlodar su energía mental en decepciones o en las fantasías de los "días de gloria" pasados. Ellos invierten la mayor parte de su energía en la creación de un presente y un futuro óptimo.
8. Cometer los mismos errores una y otra vez. Todos sabemos que la definición de locura es cuando tomamos las mismas acciones una y otra vez, con la esperanza de un resultado diferente y mejor del que hemos conseguido antes. Una persona mentalmente fuerte acepta toda responsabilidad por el comportamiento pasado y está dispuesta a aprender de los errores. Las investigaciones muestran que la capacidad de ser auto-reflexivo de una manera precisa y productiva, es una de las mayores fortalezas de los ejecutivos y empresarios especialmente exitosos.
9. Resentirse por el éxito de otra gente. Se necesita fuerza de carácter para sentir auténtica alegría y emoción por el éxito de los demás. Las personas mentalmente fuertes tienen esa capacidad. Ellos no se ponen celosos o resentidos cuando otros tienen éxito (aunque pueden tomar apuntes sobre lo que el individuo hizo bien). Ellos están dispuestos a trabajar duro para sus propias posibilidades de éxito, sin depender de los accesos directos.
10. Abandonar después de un error. Cada fracaso es una oportunidad para mejorar. Incluso los más grandes empresarios están dispuestos a admitir que sus primeros esfuerzos, invariablemente, trajeron muchos fracasos. Las personas mentalmente fuertes están dispuestas a fracasar una y otra vez si es necesario, siempre y cuando la experiencia de aprendizaje de cada " fracaso" pueda acercarlos más a sus objetivos finales.
11. Temer el tiempo a solas. Las personas mentalmente fuertes disfrutan e incluso atesoran el tiempo que pasan solos. Ellos usan su tiempo de inactividad para reflexionar, planificar, y para ser productivos. Lo más importante es que no dependen de otros para apuntalar su felicidad y estados de ánimo. Pueden ser felices con los demás, pero también puede ser feliz solos.
12. Sentir que el mundo les debe algo. Especialmente en la economía actual, los ejecutivos y empleados de todos los niveles se están dando cuenta de que el mundo no les debe un sueldo, un paquete de beneficios o una vida cómoda, independientemente de sus estudios o preparación. Las personas mentalmente fuertes entran en el mundo preparadas para trabajar y tener éxito en todas las fases del juego.
13. Esperar resultados inmediatos. Ya se trate de un plan de entrenamiento, un régimen alimenticio, o iniciar un negocio, la gente mentalmente fuerte se centra "en el largo plazo". Saben que no deben esperar resultados inmediatos. Aplican su energía y tiempo en dosis medidas, y celebran cada hito e incremento del éxito en el camino. Entienden que los cambios verdaderos llevan su tiempo.
La primavera de la economía social
Viernes, 6 de Diciembre del 2013 - 21:15
Cifras como las siguientes dejan claro que la actividad empresarial puede ser más que beneficio económico. Y también que, para la economía, es posible medir aquello que tiene valor para las personas y el medio ambiente, y no solo la pura rentabilidad: euro
POR CADA EURO invertido en reciclaje de residuos, se genera un valor de 14 euros, asegura The New Economics Foundation (NEF). Este grupo de estudio económico tiene en cuenta en su cálculo “la reducción significativa de emisiones de CO2 cuando los residuos se reciclan” y el valor obtenido con su reutilización.
POR CADA EURO invertido euro por la administración en un centro especial de empleo, que contribuye a la integración laboral de personas con discapacidad, retornan a la sociedad 1,44 euros, según un reciente estudio de Fundación ONCE y FEACEM.
No se trata de números aislados. En medio del invierno económico, se vive una verdadera primavera de nuevas ideas y modelos que proponen una empresa y una economía más humanas. También de iniciativas que los llevan a la práctica.
Ideas en ebullición por una economía humana
Apostar por una producción más ecológica. Responsabilizarse de las condiciones laborales de los proveedores, aunque estén al otro lado del mundo. O limitar las grandes diferencias salariales dentro de una empresa.
Son algunas ideas que recogen iniciativas de diverso cariz pero que coinciden en defender una economía sin divorcio entre el beneficio económico y el social:
1. Premiar a los más responsables, no a los más baratos
La Economía del Bien Común es un modelo económico alternativo que propone medir la actividad de las empresas en términos de beneficio social. Según su impulsor, el profesor de Economía austríaco Christian Felber, esto permitiría identificar a las empresas más responsables, y no solo a las que ofrezcan precios más bajos o realicen más publicidad. Las instituciones podrían concederles facilidades y las personas premiarlas en su consumo cotidiano.
2. Contabilizar el beneficio social
En Reino Unido, la entidad New Economics Foundation -que ha recibido financiación de la sucursal británica de Triodos Bank- y otras entidades sugieren el modelo Retorno Social de la Inversión. En este caso, se trata de medir “los valores de las personas que el mercado suele excluir, utilizando los mismos términos que utiliza el mercado, es decir, calcularlos en términos monetarios”. Un ejemplo sería el mencionado sobre el valor social del reciclaje. Bajo el lema “si no se mide, no existe”, en España, la organización Nittua ofrece un cursos para aprender a contabilizar y poner en valor el retorno social de la inversión.
3. Estimular la transparencia
La iniciativa Global Reporting Initiative (GRI), que cuenta con la colaboración de Naciones Unidas, es seguida por muchas empresas como el estándar para medir sus progresos en sostenibilidad. El modelo GRI es un conjunto de indicadores económicos, sociales y medioambientales sobre los que una empresa informa, en lugar de limitarse a ofrecer sus datos sobre beneficios. Completar más indicadores de impacto social permite mejorar la nota de la empresa, incentivando la mejora continua. Los promotores del sistema continúan incorporando nuevos indicadores, entre los más recientes, datos sobre el comportamiento de una empresa respecto a las personas discapacitadas.
4. Medir qué aportan los bancos a la sociedad
En el sector bancario, la Alianza Global para una Banca con Valores (GABV), que reúne a entidades de banca ética y sostenible como Triodos Bank, ha creado una metodología para comparar los bancos no solo por sus beneficios sino también por su impacto en la economía real. La GABV da valor a datos como, por ejemplo, al volumen de préstamos a empresas realizados por los bancos en relación con sus recursos totales. La entidad publica un estudio periódico con sus resultados. economía real y sostenible
Adiós al “arte de la guerra” en los negocios
El modelo de El arte de la guerra, el libro sobre estrategia militar que ha sido obra de cabecera en la formación de no pocos empresarios, parece ir quedando atrás.
Al menos, desde espacios empresariales de referencia también se comienzan a promover las llamadas “inversiones de impacto social”. Por ejemplo, la escuela de negocios ESADE propone en su I Foro de Inversión de Impacto Social, que tiene lugar hoy en Barcelona con la participación como invitado de Triodos Bank, invertir “expresamente en iniciativas capaces de producir un impacto social o medioambiental positivo. La organización entiende que se trata de aquellas en las que el impacto en la sociedad ”forma parte de su estrategia de negocio” y que su consecución se debe “medir como parte del éxito de la inversión”.
La aportación de Triodos Bank
“Triodos Bank no se creó para hacer beneficios, sino para contribuir a mejorar la sociedad desde el sector financiero, los resultados económicos vienen luego”, explica el subdirector general de Triodos Bank, Joan Antoni Melé, recordando la misión del banco. Un propósito inicial que se plasma diariamente en la financiación transparente de iniciativas que combinan viabilidad económica con un impacto social positivo.
En coherencia, Triodos Bank publica un Informe Anual que recoge de forma conjunta los resultados económicos y el impacto del banco. Incluye, por ejemplo, que en 2012 se financiaron proyectos de energía verde que generan electricidad para 1,3 millones de personas en Europa o servicios de atención a mayores para casi 10.000 personas y actividades culturales en las que han participado casi 6 millones de personas.
Y qué puedo hacer yo
Consumo responsable Auge del consumo comprometido: Las cifras del comercio justo y la agricultura ecológica siguen creciendo, pese a la crisis Cada vez más empresas y organizaciones se inspiran en alguno de las propuestas por una economía más humana citadas, o deciden dar pasos en positivo por propia iniciativa.
Los ciudadanos también están respondiendo, haciendo crecer actividades comprometidas como la agricultura ecológica o el comercio justo en plena crisis. La última palabra para que estas iniciativas continúen avanzando y que se produzca un cambio sustancial en la economía es de todos.