por admin » Vie Ago 08, 2014 10:04 pm
El capital de riesgo vuelve a ponerse de moda
En el primer semestre, las firmas de capital de riesgo invirtieron casi US$5.000 millones en compañías recién formadas, o startups, un salto de 45% frente al mismo período del año pasado y el nivel más alto desde la fiebre de las puntocom.
El capital de riesgo está expandiendo sus horizontes y tratando de mantenerse a la vanguardia de tecnologías que cambian a toda velocidad. Estas empresas buscan formas menos riesgosas de innovar, modernizar sus modelos de negocios y obtener retornos más jugosos. La inversión de capital semilla, por ejemplo, registró un alza de casi 70% frente al primer semestre de 2013 para bordear los US$15.700 millones, según Dow Jones VentureSource.
Más allá de los inversionistas tradicionales en empresas tecnológicas y farmacéuticas, hay una creciente gama de compañías que están incursionando en el negocio del capital de riesgo, incluyendo la cadena de tiendas de conveniencia 7-Eleven Inc. y la empresa de indumentaria Patagonia Inc.
"Por primera vez en varios años creo que las compañías están reorientando su enfoque desde cómo reducir costos a cómo hacer crecer el negocio", dice Mark Zandi, economista jefe de Moody's MCO +1.12% Analytics. "Parece haber un cambio de actitud con respecto al riesgo entre muchos empresarios y muchas industrias".
Raja Doddala, vicepresidente de gestión de portafolio de 7-Ventures, la división de capital de riesgo de la cadena 7-Eleven, no busca un retorno rápido con sus inversiones sino que se pregunta: "¿Estamos solucionando problemas que se van acumulando en nuestras tiendas?".
Doddala ha invertido en los últimos 12 meses en una empresa de quioscos de café automatizados, una aplicación para smartphones que sigue los resultados de la lotería, otra aplicación para hacer copias de llaves a partir de una foto, y una firma, llamada Belly Inc., que desarrolló un programa de tarjetas de lealtad para clientes.
Belly ya había recibido una importante cantidad de financiamiento de Andreessen Horowitz, una importante empresa de capital de riesgo. La inyección de fondos de 7-Eleven "me permitió aprender más sobre cómo piensan las grandes cadenas minoristas", apunta Logan LaHive, fundador de Belly. "Realmente lo que esperábamos era un intercambio de conocimientos".
El capital de riesgo también está llenando el vacío dejado por los bancos tradicionales, que siguen siendo reacios a otorgar créditos a empresas más pequeñas con ideas de vanguardia. A pesar de una reciente alza, el volumen de préstamos a pequeñas empresas aún no retoma los niveles previos a la recesión. Los préstamos a pequeñas empresas constituyeron apenas 21% de los créditos comerciales al final del primer trimestre, el porcentaje más pequeño en dos décadas, según los datos más recientes de la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
Si bien los fondos convencionales de capital de riesgo siguen activos, las divisiones de capital de riesgo dentro de otras empresas están participando en una mayor cantidad de acuerdos, especialmente en etapas medianas y avanzadas. El año pasado, los brazos de capital de riesgo de las empresas participaron en cerca de 40% de las mayores rondas de financiamiento de empresas tecnológicas que no cotizan en bolsa, el doble que en 2009, según CB Insights Inc.
"El capital de riesgo es una clase de activo altamente riesgoso. No ha superado los retornos del S&P 500 durante al menos la última década", afirma Anand Sanwal, presidente ejecutivo de CB Insights. "Por lo general, sólo hay un puñado de fondos que generan la mayoría de los retornos en la industria".
Lo mismo se puede decir de las filiales de capital de riesgo de los conglomerados. Las empresas deben tener la capacidad de abordar el éxito o el fracaso de sus inversiones de riesgo, remarca Bill Maris, fundador y socio gerente de Google GOOGL +1.07% Ventures, que acaparó los titulares en junio al aumentar su participación en el servicio de automóviles Uber Technologies Inc. Añadió, sin embargo, que nunca invirtieron "con Google en mente como el comprador".
También hay compañías que valoran menos los retornos financieros que la misión. Patagonia, por ejemplo, lanzó su división de capital de riesgo el año pasado, la que bautizó $20 Million & Change, con el "fin de financiar startups con ideas similares" que están sacudiendo sus industrias al tener una mayor conciencia ecológica, señala Rose Marcario, presidenta ejecutiva de Patagonia. La firma invirtió en CO2Nexus Inc., que procesa textiles con dióxido de carbono reciclado en lugar de agua. También está buscando inversiones en "energía limpia y la cadena de suministro de alimentos".