Brasil prepara nueva subida fuerte de tasas de interés para combatir inflación: sondeo
Por Alonso Soto
BRASILIA (Reuters) - Brasil probablemente mantendrá el miércoles su agresivo ritmo de alzas de las tasas de interés para controlar el avance de los precios, a pesar del creciente temor de que su otrora boyante economía pueda entrar este año en recesión.
De los 48 economistas consultados por Reuters, 45 esperan una segunda subida consecutiva de medio punto en la tasa referencial Selic, hasta el 12,25 por ciento, su mayor alza desde agosto de 2011.
El resto espera una subida menor de 0,25 puntos básicos.
La presidenta, Dilma Rousseff, ha prometido reducir la inflación, que está por encima del objetivo oficial, en lo que sería un importante cambio político recién comenzado su segundo mandato, en un intento de recuperar la confianza de los inversores y reactivar la deprimida economía.
El banco central endureció también su discurso con promesas de hacer "lo que sea necesario" para devolver la inflación de vuelta al objetivo oficial central del 4,5 por ciento para 2016.
"Calculamos que el banco subirá la tasa Selic hasta el 12,25 por ciento, y hará público un comunicado que le dará libertad para una nueva alza de 0,25 o 0,50 puntos básicos en la siguiente reunión", dijo Mario Mesquita, ex director del banco central y economista jefe de Brasil Plural, en una nota a sus clientes.
Aunque el Gobierno de Rousseff planea recortar el gasto para ayudar al banco central, se espera que fuertes alzas en las tarifas de electricidad y en los pasajes de autobuses empujen la inflación a máximos en más de tres años a mediados de enero.
Una ola de subidas de impuestos anunciada el lunes para frenar el creciente déficit fiscal también mantendrá presión sobre la inflación.
Una combinación de más gasto público, altos precios de los alimentos y una fuerte depreciación del real ha mantenido la inflación elevada en los cuatro últimos años, erosionando la confianza de los inversores y consumidores en una economía que creció a una media del 4 por ciento anual en la pasada década.
La economía brasileña apenas se expandió el año pasado y podría entrar en recesión este año, ya que los débiles niveles actuales de consumo e inversión están amenazados por un posible racionamiento de agua y energía por la prolongada sequía.
Un creciente escándalo de corrupción en la compañía estatal Petrobras podría afectar también a la inversión en otros sectores de la economía.
El ajuste fiscal y monetario podrían desacelerar más la economía, pero los expertos aseguran que es necesario para eliminar distorsiones y establecer las bases para un nuevo periodo de crecimiento rápido.