por Fenix » Mié Ene 28, 2015 1:24 pm
El desplome en los mercados griegos preocupa a los inversores
Moderados descensos en las bolsas europeas a la espera del comunicado de la Fed
Mi�rcoles, 28 de Enero del 2015 - 11:39:36
Moderadas caídas al cierre de las bolsas europeas, mayor en el caso de los índices periféricos sobre todos en el sector bancario, en una sesión protagonizada por las fuertes caídas de los activos de riesgo en Grecia, los buenos resultados empresariales en EE.UU. y a la espera de la decisión de la Reserva Federal.
La sesión comenzaba con los datos en Alemania de los precios a la importación (-1,7% vs -1,5% esperado) que ahondaban más en el escenario deflacionista en el que nos manejamos en Europa, y la confianza consumidora alemana en el mes de febrero, subidas del 9,3 frente 9,1 esperado.
Las bolsas europeas subían medio punto porcentual en preapertura, mientras que en Asia los mercados de valores cerraban mixtos, con caídas en el índice chino en mínimos de una semana. Tim Schroeders, de Pengana Capital, afirmaba: "Podemos ver algunas rebajas de beneficios bastante sustanciales en los EE.UU. Eso va a poner un freno en el mercado de Estados Unidos y a nivel mundial. Si las ganancias más débiles se convierten en una tendencia, vamos a tener más volatilidad".
La fortaleza del dólar está afectando a muchas de las grandes compañías estadounidenses, y esto se está reflejando en los resultados. Sin embargo, la mayor de todas, Apple, publicaba ayer a cierre de mercado estadounidense unos excelentes resultados, con fuertes e inesperadas subidas tanto en la parte alta como en la baja de sus cuentas. Al cierre del mercado español el valor subía más del 7%.
Poco antes de la apertura de las bolsas europeas se publicaba el índice de confianza consumidora en Francia de enero que se situaba en 90 puntos frente 91 esperado.
La renta variable, como apuntaba en preapertura, abría con moderadas alzas cercanas al medio punto porcentual, aunque el volumen de contratación era escaso. Excepto los datos macro ya comentados, no había ninguna otra referencia económica de importancia, por lo que los inversores volvían a centrar su interés en el mercado griego.
El nuevo primer ministro del país, Alexis Tsipras, en su primera comparecencia en el parlamento, intentaba calmar a las autoridades internacionales y a los inversores y declaraba que no tenía la intención de buscar una confrontación con los acreedores del país. "Quiero mantener los compromisos con mis pares de la UE. Negociaré con los acreedores el alivio de la deuda y las medidas de austeridad. Mi prioridad son los más necesitados y la lucha contra la corrupción", declaraba.
Estas palabras no calmaban a los inversores que castigaban con fuerza los activos griegos. Fuertes descenso de su mercado de valores, especialmente de los títulos bancarios y de la deuda pública del país.
El Ministro de Finanzas heleno Varoufakis no era tan "conciliador" como el primer ministro, y declaraba que "hoy se ha dado la vuelta a la página del equivocado rescate financiero El acuerdo de rescate fue un error. Vamos a cambiar la lógica de la lucha contra los problemas griegos. Grecia buscará nuevo acuerdo con los acreedores".
Varoufakis es de la línea dura del partido y será un agresivo negociador con la Troika. Esto hace pensar que las posiciones podrían extremarse y que finalmente no se llegar a un acuerdo.
Este escenario pesaba en el ánimo inversor incrementado la presión vendedora, y llevando a los indicadores europeos a terreno negativo tras la primera hora de negociación. Estos descensos se fueron incrementando hasta cerca de los mínimos intradía en los que ha cerrado la sesión. Con un índice de valores griego perdiendo más del 9%, en lo que es el nivel más bajo desde septiembre de 2012.
"Hay mucha incertidumbre sobre lo que el nuevo gobierno griego va a hacer. Las acciones de los bancos griegos se han visto golpeadas, mientras que los depósitos están empezando a dejar el país, y esto está incrementado el nerviosismo", afirmaba Anthony Cronin de SG.
David Keeble, estratega de Credit Agricole, añade que el contagio está siendo moderado porque "los bancos europeos no poseen deuda griega, y esta fue la primera causa del contagio que se produjo en 2010-2012"
Otro factor que penalizaba a los mercados de valores era la decisión sobre tipos de interés de la Reserva Federal de EE.UU., que conoceremos en unas horas, y sobre todo el comunicado posterior donde los rumores apuntan a un mensaje más "hawkish". No creemos que esto se produzca por los siguientes motivos:
- Los últimos datos macro se han situado por debajo de las previsiones, especialmente los pedidos de fábrica y la inversión empresarial.
- Las economías internacionales están mostrando debilidad: Europa, Japón, emergentes y la propia China, muestran pocos síntomas de reactivación económica.
- La subida del dólar está penalizando las cuentas de las compañías estadounidenses y está importando deflación.
- Prosigue la caída en las materias primas.
Todos estos factores hacen poco probable a nuestro entender que la Reserva Federal modifique sus comunicados anteriores, reincidiendo en que tendrán paciencia a la hora de realizar la primera subida de tipos de interés. Esto tendrá un efecto positivo mañana en las bolsas europeas.
El Estado policíaco y la guerra contra el efectivo (II y último)
por Inteligencia Financiera Global •Hace 2 horas
En la entrega pasada dijimos que el mundo atestigua una tremenda lucha entre los partidarios de la libertad y los del sometimiento. En particular, nos referimos a uno de los frentes de esa guerra en la que los todopoderosos banqueros y sus fieles cómplices intervencionistas estatales, pretenden forzar que toda transacción financiera y crédito se realice por medio del sistema bancario. Así, estos aliados ganan por partida doble: unos, recibiendo “depósitos” de los que –gracias al sistema de reserva fraccionaria, se apropian para hacer jugosos negocios con dinero ajeno; y los otros, vigilando cuánto ganan y en qué gastan sus contribuyentes para quedarse con la mayor cantidad posible de tributo.
De manera que para dichos fines resulta fundamental limitar cada vez más el uso de medios de pago que resguardan la confidencialidad de los negociantes, muy en especial, el dinero en efectivo y los metales preciosos. Bajo el pretexto del combate a operaciones financieras ilegales, el Estado comienza a criminalizar a los ciudadanos que bajo sus criterios carguen consigo, guarden o gasten “demasiados” billetes y monedas. Un atentado contra la libertad y la dignidad de quienes se supone, deberían servir.
Pruebas de que esa tendencia intervencionista global continúa con ímpetu, las hay por doquier. Suecia por ejemplo, según reportes publicados en octubre pasado, es ya una economía en la que cuatro de cada cinco transacciones se pagan electrónicamente o con tarjeta. Se estima que los suecos podrían tener la primera sociedad “libre de efectivo” –y de privacidad en movimientos financieros, hacia 2030. Por supuesto, políticos y banqueros lo ven como el modelo a seguir.
Pero de este lado del planeta, Estados Unidos y México tienen ya sus propios “avances”.
Simon Black relató hace unos meses en su portal sovereignman.com, cómo a John Anderson –un turista californiano que circulaba por una autopista estadounidense, tras ser inspeccionado por un oficial de policía éste le confiscó más de 25 mil dólares en efectivo que llevaba en su auto. Cuando el agente vio el dinero le dijo a Anderson que lo tomaría y amenazó con arrestarlo si protestaba. Un robo estatal con todas las de la ley. Anderson no tuvo de otra que dejar que se cometiera este atraco para poderse ir. Black explica que durante dos años la víctima ha tratado de forma infructuosa de recuperar su dinero. Anderson es solo un afectado más por la Confiscación de Activos Civiles. Según Black, desde el 9/11 fuerzas policiales han realizado más de 62 mil confiscaciones sin siquiera imputar cargos, por un monto superior a los 2.5 mil millones de dólares en efectivo. El costo de emprender acciones legales contra el gobierno americano es tan elevado, que solo el 17 por ciento de las víctimas las inicia, y de ellas, solo el 41 por ciento ha tenido éxito. Una tragedia en una tierra de supuesta libertad, que no existe más. El Estado pretende controlar y saberlo todo.
En nuestro país la misma presunción de culpabilidad, y no de inocencia como debería ser, se aplica para determinadas actividades consideradas como “vulnerables”. Estas se encuentran señaladas en la Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita. Para las actividades vulnerables hay requisitos y prohibiciones que se deben cumplir. Aquí reproducimos un cuadro ilustrativo publicado en el Portal de Prevención de Lavado de Dinero de la Secretaría de Hacienda, sobre los umbrales vigentes de restricción al uso de efectivo y metales preciosos (continúa después de la imagen) en las siguientes operaciones:
Imagen
Por cierto, que se restrinja en la ley el pago con metales preciosos es un reconocimiento implícito de su condición de dinero real.
Ahora, para quienes realicen actividades vulnerables, la ley aludida establece obligaciones como: darse de alta y registro ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT), identificar a los clientes y usuarios –con todo y copia de su documento oficial, presentar los Avisos e informes a la Unidad de Inteligencia Financiera por conducto del SAT y custodiar, proteger, resguardar y evitar la destrucción u ocultamiento de la información. Son ya un policía más.
A propósito de los Avisos, se presentan por la simple realización de la actividad en unos casos, mientras que en otros hay un umbral para tal efecto. Se sugiere consultar aquí.
Jorge García Villalobos, Socio líder de Servicios de Investigación Forense de Deloitte México, aclara que no está prohibido comprar artículos suntuosos, pero que la ley establece los límites al pago con efectivo. Como quiera, con tarjeta o transferencia electrónica las operaciones se deben reportar a la autoridad. El especialista explica que México se puso al día con los requerimientos del “Grupo de Acción Financiera contra el lavado de dinero” (GAFI) y que el mero aviso, no implica en automático que la autoridad investigará al cliente, “simplemente es el procedimiento con el cual sabe qué, quién y cómo se están comprando los bienes”, señaló. Eso sí, el experto concluye que “no se debe ver a esta ley como la panacea con la que se acabará el lavado de dinero”. Tiene razón.
De hecho, como comentamos en el artículo previo, el combate a ese tipo de delitos es solo la justificación perfecta para avanzar en el control estatal sobre la vida de las personas.
La buena nueva es que cada día son más los que abren los ojos a esta innegable realidad que, al atentar contra la libertad, pone en riesgo no solo a sus derechos sino al progreso de la economía misma. Y es que el intervencionismo estatal implica, como es obvio, vulnerar a conveniencia la propiedad privada desde múltiples frentes –confiscaciones, corrupción monetaria, impuestos, etc., y sin ella, el mundo de avances que conocemos, ahorra correrá hacia atrás.