por admin » Mié Feb 02, 2011 11:06 pm
Otro orgullo para el Peru
El Apartheid economico de Egipto
Mas del 90% de los Egipcios no tienen titulo legal de sus propiedades. No es casualidad que ellos no pueden acumular liqueza y han perdido toda esperanza.
By Hernando de Soto
El titular que aparecio en Al Jazeera el 14 de Enero, una semana antes de las protestas, afirmaba que "el verdadero terror en el mundo Arabe es la marginalizacion socio-economica"
El gobierno de Egipto estaba por mucho tiemp preocupado por las consecuencias de la marginalizacion. En 1997, con el apoyo financiero de US Agency for International Development, el gobierno me contrato (Institute for Liberty and Democracy) Querian conocer el numero de Egipcios que estaban marginalizados y cuanto de la economia operaban "ilegalmente" eso, es si la proteccion de los derechos de propiedad o el acceso a la economia formal, como el credito, que ayuda a los negocios a prosperar y expandirse. El objetivo era remover los impedimentos legales a la gente y los negocios.
Despues de anios de investigacion y analisis - que necesitaron 120 tecnicos Egipcios y Peruanos con la participacion de 300 lideres locales y entrevistas con miles de personas ordinarias - nosotros presentamos los resultados, un reporte de 1,000 paginas con un plan de accion de 20 puntos a los 11 miembros del cabinete en el 2004. El reporte fue presentado al Ministro de Finanzas Muhammad Medhat Hassanein, y el cabinete aprobo sus recomendaciones.
El diario mas importante, Al Ahram, declaro que las reformas "abririan las puertas de la historia para Egipto" entonces, como resultado del cambio de cabinete, Mr. Hassanein fue despedido. Fuerzas escondidas bloquearon los elementos cruciales de las reformas.
Hoy dia, las calles estan llenas de muchos Egipcios que llaman al cambio, vale la pena notar que algunos de los hechos mas importantes descubiertos por nuestra investigacion en el 2004:
- La economia informa es el mas grande empleador del pais. El sector privado legar emplea a 6.8 millones de personas, mientras el publico 5.9 millones, 9.6 millones trabajan en el sector informal.
-El 92% de los bienes raices no mantienen un titulo de propiedad.
- Nosotros estimamos que el valor de la economia y las propiedades informales, rurales como urbanas, son $248 billones - 30 veces mas grandes que el valor de mercado de las companias registradas en el Cairo Stock Exchange y 55 veces mas grandes que el valor de la inversion extranjera directa en Egipto desde que Napoleon invadio - incluyendo el Suez Canal y el Aswan Dam. La cifra de la economia informa el dolares actuales es mas de $400 billones.
- Los empresarios que operan fuera del sistema legal estan rezagados. Ellos no tienen acceso a la organizacion de los negocios,, partnerships, join stock companies, corporations, etc, que los ayudaria a crecer de manera legal. Porque las companias no tienen contratos legales ni reglas, los bancos y demas no pueden confiar en ellos. Esto hace mas dificil o imposible contratar a los mejores profesionales y los duenios de estos negocios no pueden emitir deuda mediante bonos o IOUs o obtener credito.
Sin claros titulos de propiedad legal de sus activos o propiedades, estos empresarios tienen capital muerto en sus manos, las propiedades no pueden hipotecarse para obtener prestamos, obtener caital o darlos como garantias en contratos a largo plazo. Asi estos Egipcios se mantienen pequenios y relativamente pobres. Lo unico que puede emanciparlos es la reforma legal. Y solo el liderazgo politico puede solucionar esto. Muchos technocratas no han sido entrenados para expander las leyes, si no para defenderlas como las encuentran. Emancipar a la gente de malas leyes y salir de la inercia del status quo es un trabajo politico.
La pregunta primordial es preguntar por que la mayoria de los Egipcios eligen mantenerse fuera de la legalidad economica? la respuesta es que como en la mayoria de los paises en desarrollo, las autoridades e instituciones Egipcias le fallan a la mayoria de sus ciudadanos. Debido a la burocracia, malas leyes, discriminacion, es imposible para la mayoria de personas legalizar sus propiedades o sus negocios, no importa que tan bien intencionados sean.
Los ejemplos son muchos. Para abrir una pequenia pasteleria, nuestros investigadores encontraron, que uno se demoraria mas de 500 dias. Para obtener el titulo legal de un pedazo de tierra vacante tomaria mas de 10 anios. Para hacer negocios en Egipto, un empresario aspirante tendria que lidiar con 56 agencias del gobierno y repetir inspecciones muchas veces.
Por eso los Egipcios no pueden mejorar sus vidas.
Hacer que la mayoria de los Egipcios entren al sistema legal romperia el apartheid economico de Egipto. Dandole el poder a los pobres comenzaria con otorgar titulos de propiedad a los $400 billones de activos que nosotros encontramos en la informalidad. Esto abriria las puertas de cientos de veces el capital que entra al pais como inversion extranjera y lo que Egipto recibe en ayuda internacional.
Los lideres y gobiernos pueden cambiar y mas democracia puede llegar a Egipto. Pero hasta que no existan instituciones legales y reformas que permitan que el crecimiento economico suba de abajo para arriba, las aspiraciones de una vida mejor estan motivando a muchos a salir a protestar a las calles jamas seran alcanzadas.
Mr. de Soto, author del Misterio del Capital (Basic Books, 200) y El Otro Sendero (Harper and Row, 1989) es el presidente del Institute for Liberty and Democracy con sede en Lima, Peru.
Egypt's Economic Apartheid
More than 90% of Egyptians hold their property without legal title. No wonder they can't build wealth and have lost hope
By HERNANDO DE SOTO
The headline that appeared on Al Jazeera on Jan. 14, a week before Egyptians took to the streets, affirmed that "[t]he real terror eating away at the Arab world is socio-economic marginalization."
The Egyptian government has long been concerned about the consequences of this marginalization. In 1997, with the financial support of the U.S. Agency for International Development, the government hired my organization, the Institute for Liberty and Democracy. It wanted to get the numbers on how many Egyptians were marginalized and how much of the economy operated "extralegally"—that is, without the protections of property rights or access to normal business tools, such as credit, that allow businesses to expand and prosper. The objective was to remove the legal impediments holding back people and their businesses.
After years of fieldwork and analysis—involving over 120 Egyptian and Peruvian technicians with the participation of 300 local leaders and interviews with thousands of ordinary people—we presented a 1,000-page report and a 20-point action plan to the 11-member economic cabinet in 2004. The report was championed by Minister of Finance Muhammad Medhat Hassanein, and the cabinet approved its policy recommendations.
Egypt's major newspaper, Al Ahram, declared that the reforms "would open the doors of history for Egypt." Then, as a result of a cabinet shakeup, Mr. Hassanein was ousted. Hidden forces of the status quo blocked crucial elements of the reforms.
Today, when the streets are filled with so many Egyptians calling for change, it is worth noting some of the key facts uncovered by our investigation and reported in 2004:
• Egypt's underground economy was the nation's biggest employer. The legal private sector employed 6.8 million people and the public sector employed 5.9 million, while 9.6 million people worked in the extralegal sector.
• As far as real estate is concerned, 92% of Egyptians hold their property without normal legal title.
• We estimated the value of all these extralegal businesses and property, rural as well as urban, to be $248 billion—30 times greater than the market value of the companies registered on the Cairo Stock Exchange and 55 times greater than the value of foreign direct investment in Egypt since Napoleon invaded—including the financing of the Suez Canal and the Aswan Dam. (Those same extralegal assets would be worth more than $400 billion in today's dollars.)
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Associated Press
Waiting in line for bread in Cairo, Feb. 2
.The entrepreneurs who operate outside the legal system are held back. They do not have access to the business organizational forms (partnerships, joint stock companies, corporations, etc.) that would enable them to grow the way legal enterprises do. Because such enterprises are not tied to standard contractual and enforcement rules, outsiders cannot trust that their owners can be held to their promises or contracts. This makes it difficult or impossible to employ the best technicians and professional managers—and the owners of these businesses cannot issue bonds or IOUs to obtain credit.
Nor can such enterprises benefit from the economies of scale available to those who can operate in the entire Egyptian market. The owners of extralegal enterprises are limited to employing their kin to produce for confined circles of customers.
Without clear legal title to their assets and real estate, in short, these entrepreneurs own what I have called "dead capital"—property that cannot be leveraged as collateral for loans, to obtain investment capital, or as security for long-term contractual deals. And so the majority of these Egyptian enterprises remain small and relatively poor. The only thing that can emancipate them is legal reform. And only the political leadership of Egypt can pull this off. Too many technocrats have been trained not to expand the rule of law, but to defend it as they find it. Emancipating people from bad law and devising strategies to overcome the inertia of the status quo is a political job.
The key question to be asked is why most Egyptians choose to remain outside the legal economy? The answer is that, as in most developing countries, Egypt's legal institutions fail the majority of the people. Due to burdensome, discriminatory and just plain bad laws, it is impossible for most people to legalize their property and businesses, no matter how well intentioned they might be.
The examples are legion. To open a small bakery, our investigators found, would take more than 500 days. To get legal title to a vacant piece of land would take more than 10 years of dealing with red tape. To do business in Egypt, an aspiring poor entrepreneur would have to deal with 56 government agencies and repetitive government inspections.
All this helps explain who so many ordinary Egyptians have been "smoldering" for decades. Despite hard work and savings, they can do little to improve their lives.
Bringing the majority of Egypt's people into an open legal system is what will break Egypt's economic apartheid. Empowering the poor begins with the legal system awarding clear property rights to the $400 billion-plus of assets that we found they had created. This would unlock an amount of capital hundreds of times greater than foreign direct investment and what Egypt receives in foreign aid.
Leaders and governments may change and more democracy might come to Egypt. But unless its existing legal institutions are reformed to allow economic growth from the bottom up, the aspirations for a better life that are motivating so many demonstrating in the streets will remain unfulfilled.
Mr. de Soto, author of "The Mystery of Capital" (Basic Books, 2000) and "The Other Path" (Harper and Row, 1989), is president of the Institute for Liberty and Democracy based in Lima, Peru.