Año XIII - Madrid, Lunes 07 de Febrero de 2011
EEUU culpa a China de los problemas de Brasil con el real
Americaeconomica.com
Timothy Geithner parece dispuesto a ganarse los favores de Brasil para contrarrestar la rigidez de la moneda china y la presencia del gigante asiático en América Latina. Durante la visita que realiza al país gobernado por Dilma Rousseff, el Secretario del Tesoro de EEUU ha anunciado su intención de respaldar una mayor presencia brasileña en el FMI así como de ampliar los lazos comerciales existentes.
El pasado año, China superó a EEUU como principal socio comercial de Brasil. Las críticas soterradas del funcionario estadounidense hacia la rigidez con la que China gestiona su moneda, el yuan, vinieron soterradas tras una mención a Brasilia. “Sería de gran ayuda para Brasil si algunas de los otros grandes socios comerciales tuvieran políticas de tipo de cambio más flexibles", dijo Geithner. "Esta flexibilidad vendrá. Sucederá, y queremos fomentarla, pero se encuentra en las primeras etapas".
Lo cierto es que el país gobernado por Dilma Rousseff se ha convertido en los últimos años en un actor importante, trascendental en América Latina, de la economía mundial. En este sentido, Geithner ha asegurado que EEUU está listo para respaldar una expansión de dicha influencia en el Fondo Monetario Internacional, donde Brasil se ha convertido en uno de los principales accionistas de la entidad.
"Brasil es una potencia económica y financiera importante en la escena global. Nuestras economías tienen fuerzas semejantes y enfrentan desafíos semejantes", ha asegurado el Secretario del Tesoro, que recordó que “El comercio bilateral entre los dos países prácticamente se dobló desde el comienzo del siglo, así como las inversiones y el flujo de capitales en ambos sentidos".
El Gobierno brasileño ha acusado a EE.UU. y a China de promover una guerra cambiaria para aumentar sus exportaciones, lo que está reduciendo la competitividad de naciones en desarrollo como Brasil. Según Geithner, la apreciación del real es provocada por un ingreso masivo de capitales al país atraídos por el propio crecimiento de la economía brasileña y por las elevadas tasas de intereses ofrecidas por el país.
El Secretario del Tesoro culpó de manera indirecta a China de los problemas que Brasil está teniendo con el real. "Esos flujos (de capitales) han sido favorecidos por las políticas de otras economías emergentes que están intentando mantener sus monedas desvalorizadas", aseguró.