por admin » Jue Mar 14, 2013 10:32 am
En una buena señal sobre la economía de EE.UU., el dólar recobra ímpetu
Después de una caída de meses, el dólar ha vuelto a subir frente a las principales monedas del mundo. El cambio de tendencia ha sido impulsado por el relativo fortalecimiento de la economía estadounidense, que ha apuntalado el papel de la divisa como un eje del sistema financiero global.
El Índice del Dólar WSJ, que mide el desempeño de la divisa estadounidense frente a siete de las monedas más transadas del mundo, acumula un alza de casi 5% en lo que va del año y el lunes alcanzó su nivel más alto desde julio de 2010. El miércoles subió 0,3% después de que se conocieran reportes de que las ventas minoristas en EE.UU. crecieron casi el doble de lo que esperaban los economistas.
Los economistas señalan que el dólar aún no se ha apreciado lo suficiente como para representar una amenaza seria a la recuperación de la economía de EE.UU. Su fortalecimiento, no obstante, ya empieza a manifestarse en los reportes financieros de las empresas estadounidenses, cuyas ganancias obtenidas en otros países valen menos cuando se convierten a dólares. Los turistas estadounidenses le sacan un poco de más provecho a sus dólares en los viajes al exterior, al paso que los británicos y japoneses tendrían menos incentivo para ir a EE.UU. ante el debilitamiento de la libra esterlina y el yen.
Analistas, expertos e inversionistas señalan que el alza del dólar refleja la misma postura optimista acerca de la economía estadounidense que ha impulsado al Promedio Industrial Dow Jones a niveles récord en las últimas jornadas. Uno de los mejores días del dólar este año tuvo lugar el viernes, después de que se anunciara una caída del desempleo en EE.UU. a 7,7% en febrero, su nivel más bajo en cuatro años.
Por otra parte, el diagnóstico de los principales socios comerciales de EE.UU. no es tan saludable, un factor que pesa tanto en el avance del dólar como las mejores perspectivas de EE.UU. El Fondo Monetario Internacional proyecta un crecimiento de 2% en EE.UU. este año, comparado con 1,2% en Japón y 1% en Gran Bretaña. La zona euro registraría una contracción de 0,2%, según el FMI.
El fortalecimiento de la economía estadounidense es una buena noticia para América Latina, ya que alivia la presión sobre los tipos de cambio, (las monedas locales de la mayoría de las economías de la región se han apreciado en forma importante), y mejora las perspectivas de los precios de las materias primas que exportan los países latinoamericanos, señaló José María Barrionuevo, director gerente de la firma de asesoría financiera StormHarbour Partners. "La única economía del mundo que puede empujar el crecimiento (global) es EE.UU. Es el país que está mejor posicionado para crecer en el mundo", observó, aunque advirtió que las mejoras son tenues y comparadas contra una base débil por lo que aún queda un largo camino por recorrer.
La expansión de la economía estadounidense sigue siendo débil comparada con el auge de inicios de la década de 2000. En ese entonces, el Índice del Dólar WSJ estaba casi 30% por encima de los niveles actuales. Aunque la divisa estadounidense sigue siendo la moneda predominante en las reservas extranjeras y el comercio internacional, su participación ha ido cayendo a medida que otras divisas como el euro y el yuan han ganado terreno.
Asimismo, numerosos inversionistas tienen dudas acerca de la sostenibilidad de la recuperación estadounidense. Un factor que podría frenar el crecimiento son los recortes en el gasto fiscal por US$85.000 millones que entraron en efecto el primero de marzo, mientras que la incapacidad del Congreso estadounidense para abordar el déficit fiscal perjudicaría el desempeño del dólar. A su vez, las políticas de estímulo de la Reserva Federal, que podrían haber reactivado la economía, podrían provocar un alza de la inflación, que en estos momentos se ubica en un nivel moderado.
De todos modos, con el alza del dólar, tales preocupaciones empiezan a ser reemplazadas por las preocupaciones de los exportadores estadounidenses que temen que sus bienes se encarezcan demasiado en los mercados globales. Mientras tanto, los importadores de ese país encuentran que su dinero les alcanza para más.
"Este es el mejor entorno en el que hemos estado en cuanto a la moneda", dijo Daniel Dowe, presidente del importador de quesos Artisanal Brands Inc. "Nuestra economía se fortalece y nuestra divisa mejora". El dólar se ha apreciado 4,4% frente al euro desde inicios de febrero.
Gracias a una recuperación relativamente robusta, la economía estadounidense podría ser la primera en dejar atrás uno de los legados de la crisis financiera: las compras de bonos de los bancos centrales. Estas medidas han generado polémica debido a su potencial para generar inflación y han despertado críticas en América Latina y otras regiones, cuyas monedas se han apreciado en los últimos años.
Los analistas del banco de inversión suizo UBS prevén que el dólar será una de las divisas importantes de mejor desempeño este año puesto que esperan que la recuperación de EE.UU. le permita a la Reserva Federal ser el primer banco central de una economía grande en empezar a retirar las medidas de estímulo.
"La fortaleza del dólar claramente nos perjudica", señaló Dennis Zeitler, director de finanzas de Mine Safety Appliances Co., un fabricante estadounidense de productos de seguridad como respiradores y máscaras de gas. "Todo lo que ganamos fuera de EE.UU. se traduce en menos dólares". De todas maneras, Zeitler es partidario de un dólar más fuerte a largo plazo porque refleja una economía saludable, lo que al final generará mayor demanda por los productos de su empresa. "A largo plazo, prefiero vender más productos que traducir la misma cantidad de ventas a un tipo de cambio más alto".
Los economistas dicen que aún tienen que pasar muchas cosas antes de que el repunte del dólar amenace las exportaciones estadounidenses. "Si hay un movimiento sostenido durante más de seis meses, eso podría ser problemático", indicó Drew Matus, subdirector de economía de EE.UU. de UBS Securities. Agregó, sin embargo, que el dólar no se ha fortalecido lo suficiente para amenazar a la mayor parte de los exportadores estadounidenses.
La evolución del dólar en 2013 dependerá en buena parte de las expectativas del mercado sobre los próximos pasos de la Fed. Pero incluso si el banco central estadounidense se queda de brazos cruzados, el dólar se podría apreciar contra algunas monedas. Se espera que el Banco de Japón y el Banco de Inglaterra intensifiquen sus políticas de estímulo este año, mientras que la debilidad de la zona euro ha incrementado la presión para que el BCE siga el ejemplo.
"Si la economía estadounidense sigue exhibiendo señales de un buen desempeño, lo más probable es que al dólar le siga yendo bien", dijo Paul Chappell, fundador y director de inversión del fondo especializado en monedas C-View, que gestiona unos US$320 millones.
—Iván Rothkegel contribuyó a este artículo.