por Fenix » Dom Jun 02, 2013 1:17 am
Como vengo publicando en las últimas semanas, el factor director clave de los mercados en estos momentos es cuando los bancos centrales retirarán sus medidas extremas de estímulo monetario. La visión general es que las consecuencias cuando esto suceda van a ser muy negativas para los mercados.
Pero no todo el mundo está de acuerdo. Nunca antes se había implementado este tipo de políticas monetarias, por lo que no tenemos referentes para intentar averiguar qué pasará cuando finalicen.
En un interesante artículo en el Wall Street Journal, Matthew Lynn, detalla cuatro formas en las que el final de la QE sorprenderá a todo el mundo. Veamos cuales son:
- Uno: Alzas en el oro. La reacción de la semana pasada no fue tan extraña como pudiera parecer a primera vista.
El oro es una cobertura decente contra la inflación. Los bancos centrales sólo retirarán la QE cuando estén convencidos de que ya no existe amenaza de deflación, y que una modesta inflación forma parte de una economía en crecimiento. Por definición, entonces, cuando se termine la QE tendremos que preocuparnos por la inflación, y en ese escenario será bueno tener en nuestras carteras un poco de oro. Al mismo tiempo, si la economía está creciendo de nuevo, los precios de las materias primas subirán, y el oro es una materia prima.
- Dos: Los bancos aumentarán su valor. La mayoría de los analistas argumentan que la QE es una forma de insuflar dinero en un sistema bancario en riesgos de bancarrota. Sin todo ese dinero barato y accesible, los balances de los bancos centrales estarían en una situación aún pero de lo que están, afirman estos analistas, por lo que hay riesgos de que el sector bancario termine estallando, y veamos quiebras como en 2008.
Equivocado de nuevo.
De hecho, en el momento en que la QE se retire, los bancos van a estar de nuevo en buena forma, porque habrán tenido suficiente dinero barato para reparar sus balances. Aún mejor, los mercados inmobiliarios están reactivándose de nuevo, y un mercado de propiedades saludable se traduce rápidamente en una banca sana. Así que las acciones de los bancos serán una buena apuesta.
- Tres: Los rendimientos de los bonos permanecerán planos. El análisis convencional afirma que la impresión de dinero de los bancos centrales mantiene los rendimientos de los bonos en sus niveles más bajos de más de medio siglo. Retirar esa liquidez provocaría un alza brusca de los rendimientos. Lo que es peor, habrá una avalancha de bonos en el mercado según los bancos centrales descarguen cientos de miles de millones que han acumulado en sus propios balances durante los últimos tres años.
Pero eso no va a suceder.
Los bancos centrales saben que la manera más rápida de dañar la economía es permitir que los rendimientos de los bonos suban considerablemente. Ellos sólo van a terminar la QE cuando las deudas gubernamentales y corporativas estén bajo control, y no van a subir los tipos de interés al mismo tiempo que están finalizando la QE. Es cierto que los rendimientos de los bonos no van a caer más, es difícil una reducción desde niveles de casi cero, pero van a mantenerse estables durante mucho tiempo después de que finalice la QE.
- Cuatro: Las acciones subirán. La corriente actual afirma que sólo la QE mantiene con vida a los mercados de renta variable. Su fin provocará un crash que hará palidecer a 1929.
Una vez más, no se está en lo cierto.
La QE sólo llegará a su fin cuando la economía adopte el camino del crecimiento, con un aumento del empleo, y un mercado inmobiliario saludable. Todo lo que es por definición, bueno para las ganancias empresariales y bueno para la renta variable. Al mismo tiempo, si los rendimientos de los bonos permanecen muy bajos, y con mayor confianza en la recuperación económica, los inversores se sentirán atraídos por los mayores rendimientos que ofrece la renta variable. Por lo que los mercados de valores subirán también.
La mayor parte del debate en torno a la QE supone que ésta va a ser retirada cuando la economía se encuentre en una situación desesperada. Pero, ¿por qué habría que pasar esto? Nadie detiene el medicamente antes que la enfermedad esté bajo control. Carlos Montero