Minutas de la Fed muestran división sobre poner fin al programa de compra de bonos
July 10, 2013 3:05 PM
El presidente de la Reserva Federal de EE.UU., Ben Bernanke. Photo: Getty Images
By Por
Victoria McGrane
y
Michael S. Derby
Las minutas de la reunión de política monetaria que celebró en junio la Reserva Federal de Estados Unidos mostraron que casi la mitad de los funcionarios de la Fed cree que el banco central debería concluir al final de este año su programa de compra de bonos de US$85.000 millones mensuales, lo que sugiere que los funcionarios están divididos en el cronograma de la próxima reducción del programa.
"Muchos otros participantes anticiparon que probablemente sería apropiado continuar las compras hasta 2014", indicaron las minutas de la reunión celebrada el 18 y 19 de junio. Los documentos fueron publicados el martes tras el retraso habitual de tres semanas.
Concluir el programa de compra de bonos completamente a fin de año es un plazo mucho más apresurado que el cronograma tentativo ofrecido por el titular de la Fed, Ben Bernanke, durante la conferencia de prensa posterior a la reunión.
En aquel entonces, Bernanke dijo que si la economía seguía mejorando como preveía la Fed, el banco central podría realizar su primera reducción del programa de compra de bonos más adelante este año. Si la economía continuaba cumpliendo con las expectativas de la Fed, las reducciones seguirían y el programa acabaría a mediados de 2014, indicó Bernanke.
Las minutas, sin embargo, muestran que los funcionarios de la Fed están más divididos de lo que sugirió Bernanke acerca de cuándo poner fin al programa.
Por ejemplo, las minutas muestran que "varios participantes" resaltaron que el programa de compra de bonos tuvo éxito en impulsar la recuperación económica y que "los beneficios continuaban excediendo los costos". Algunos incluso argumentaron que la Fed necesita seguir comprando bonos para lograr la mejora "sustancial" en el mercado laboral que la Fed quiere ver antes de terminar el programa. Pero "unos pocos" funcionarios argumentaron a favor de ralentizar las compras -o ponerle fin al programa- en la reunión de junio.
Algunos funcionarios de la Fed dijeron que no creían que el mercado laboral haya mejorado lo suficiente para que el banco central comience a retirar sus compras de bonos. El programa tiene como objetivo impulsar a la baja los costos de endeudamiento con la esperanza de incrementar la inversión, el gasto y las contrataciones.
"Aunque reconocemos la mejora en un número de indicadores de actividad económica y condiciones del mercado laboral desde el otoño [boreal], muchos miembros indicaron que se necesitaría una mejora adicional en la perspectiva del mercado laboral antes de que sea apropiado desacelerar el ritmo de las compras de activos", informaron las minutas.
"Algunos añadieron que también tendrían que observar más pruebas de que ocurriría la aceleración proyectada de la actividad económica antes de reducir el ritmo de las compras de activos".
Las minutas evidenciaron las dificultades que tienen los funcionarios de la Fed a la hora de comunicar a los inversionistas y el público general cómo tomarán las decisiones en torno al programa de bonos. De hecho, hubo extensas discusiones durante la reunión sobre cómo lograr este punto. Además de contemplar la posibilidad de que Bernanke entregara más detalles en su conferencia de prensa, algunos funcionarios sugirieron que la Fed ofrezca umbrales cuantitativos sobre indicadores económicos específicos, tal como hace con las tasas de interés a corto plazo. También se dialogó acerca de incluir algo de esto en la declaración formal de política que se publica después de la reunión, aunque al final los funcionarios del comité decidieron no hacerlo.
"Algunos anticiparon posibles dificultades para comunicar de manera concisa la información deseada en el comunicado posterior a la reunión", dijeron las minutas.
Los funcionarios parecieron estar de acuerdo, sin embargo, en que la decisión sobre le programa de bonos es diferente a la toma de decisiones en torno a las tasas a corto plazo, que se han mantenido casi en cero desde fines de 2008.
"Muchos miembros indicaron que las decisiones sobre el ritmo y la composición de las compras de activos son distintas a las decisiones sobre el nivel apropiado de la tasa de fondos federal", y que las tasas se mantendrían bajas por un período considerable tras el fin del programa de bonos, según las minutas.