por Fenix » Jue Mar 27, 2014 5:52 pm
No tiene sentido negar lo inevitable: las rentabilidades seguirán subiendo
por Mark Davies •Hace 15 horas
Este artículo se podría resumir así: En un mes ante una mayor suba de tasas uno puede perder vía mtm, el carry de tres años tal como ha sido el caso en muchas posiciones de bonos durante 2013.
Bien, como todos sabrán, la 10yr. volvió a volar. Vivimos en un mundo en donde todo se da vuelta como una media en horas. En este mundo nuevamente se torna importante decidir qué hacemos con la duration de bonos a tasa fija si es que todavía tienen alguno en la cartera.
Estos pibes anteayer te vendián una 10yr en 3%, pasaron a 2.58% y otra vez empiezan a aparecer apuestas al 3%. Todo se recicla, todo vuelve para un mercado financiero totalmente pasado de rosca e inmerso en un verso monetario interminable y a esta altura aburrido: otra vez sopa y vamos con la 10yr hacia el norte nuevamente. No caben dudas de que el 2014 será un año de Tapering y empinamientos de yields, la pregunta no es en la dirección sino en el gamma que agarre el empinamiento y para ello el wording de Janet Yellen será clave, un wording que el miércoles de la semana pasada dejó un sabor amargo e inesperado a demasiado hawkishness para la parte corta de la curva.
Hace semanas que vengo diciendo de no relajarse con la baja transitoria en la 10yr: ponerle el pecho a un tren que viene de frente en general termina siendo una mala decisión. Y en este sentido la dinámica que ofrece la 10yr por los próximos meses/años bien se asemeja a la de un tren que viene despacio, gradualmente pero sin dudas muy de frente y hacia el norte. Como comentamos en repetidas ocasiones, el mercado parecería haberse encaminado a un nuevo mini-paradigma dentro del ciclo de laxedad monetaria que ha caracterizado a la crisis desde su inicio y la baja reciente en la 10yr simplemente parecería haber sido una ventana de respiro transitorio sin cambio alguno de tendencia.
Esperar al nuevo equilibrio de yields con una duration corta (no mayor de cinco años) y con exposición Dólar Americano parecería ser una forma razonable de seguir esquivando a un tren al que la Fed a pesar de muchas dudas, le comenzó a soltar la mano, nada trágico pero un claro cambio de tendencia y por lo tanto la obligación de replantearse posiciones que han sido altamente rentables en este lustro y que están siendo cuestionadas actualmente. Si bien las tasas seguirán bajas por mucho tiempo más, parecería consolidarse un escenario de suba gradual y sostenida de yields a nivel global lo cual es una muy mala noticia para posiciones compradas en bonos con duration larga y tasa fija, cuanto más gradual la suba mejor para équities pero los bonos a tasa fija parecerían estar encaminados hacia un lose-lose scenario.
No siempre se hace necesario estar invertido agresivamente y más aún en presencia de un potencial cambio de paradigma que sin ser abrupto puede generar sustanciales pérdidas de valuación. Quizá en el contexto actual una posición de poca duration en activos denominados en Dólares a uno podría darle la chance de jugar la suba de yields vía fortalecimiento del Dólar y evitar un largo proceso de baja de precios en bonos hasta que el mercado se ubique en lo que parece ser un claro nuevo equilibrio de yields más altas con curvas de tasas más empinadas gradualmente. En un mes ante una mayor suba de tasas uno puede perder el carry de tres años tal como ha sido el caso en muchas posiciones de bonos durante 2013.
El 2013 ha encontrado a más de uno con la guardia muy baja en especial para un asset class que desde el 2008 le ha dado muchas alegrías al inversor: bonos de todo tipo, moneda y color. De hecho todos los bonos en general han sido severamente castigados como reacción obvia a la elocuente, rápida y sorpresiva suba de yields que ha afectado a los mercados desde mayo del 2013 y me inclino a pensar que la 10yr se irá a un 3% otra vez y más rápido de lo que el mercado actualmente descuenta.
Germán Fermo, Ph.D.
Director, MacroFinance
Wall Street cerró hoy a la baja una sesión volátil y el Dow Jones, su principal indicador, acabó con un descenso del 0,03 %, en una jornada en la que se mantuvieron las preocupaciones sobre la tensión internacional en torno a Crimea y se conocieron datos decepcionantes del PIB de Estados Unidos.
Al cierre de la cuarta sesión de una semana en la que tan solo un día el parqué ha terminado al alza, el Dow Jones se dejó 4,76 puntos hasta los 16.264,23 enteros, el selectivo S&P 500 retrocedió el 0,19 %, restando 3,52 puntos y situándose en las 1.849,04 unidades.
Pero un día más, el sector tecnológico vivió descensos generalizados (con una media de 0,55 % de pérdidas) y, por ello el antiguo mercado consagrado a las empresas tecnológicas, Nasdaq, sufrió las peores pérdidas y hundió su índice compuesto en la peor cifra de las últimas seis semanas, con un nuevo descenso del 0,54 % que lo situó en los 4.151,23 enteros, 22,35 menos que en la jornada precedente.
El parqué vivió una jornada volátil y circular: el índice de referencia de Wall Street había amanecido en plano, había caído en los primeros minutos, había llegado a registrar ganancias poco después y, a partir de la media sesión se mantuvo en las pérdidas leves, arrastrando en paralelo con pérdidas moderadas al selectivo S&P 500 y, con pérdidas más notables, al Nasdaq.
El primer indicador económico que decantaba a los inversores hacia las ventas después de publicarse fue el PIB de los Estados Unidos, que creció el pasado año el 1,9 %, nueve décimas menos que en 2012 y por debajo de lo que habían calculado los analistas, de entre el 2,2 % y el 3,1 %.
La desaceleración de la economía nacional pesó ya desde el principio más en el ánimo de los inversores que un dato mejor de lo esperado sobre el mercado laboral, ya que la cifra semanal de solicitudes de subsidio por desempleo se ubicó en su nivel más bajo en cuatro meses.
Hoy, los mercados internacionales también estuvieron pendientes, una vez más, de la evolución en Crimea, donde las tensiones entre Ucrania y Rusia siguieron repercutiendo en las plazas de todo el mundo ante los miedos a que las sanciones impuestas al gobierno de Vladímir Putin desestabilicen la economía.
De hecho, la Asamblea General de la ONU aprobó hoy una resolución que apoya la integridad territorial de Ucrania, y destacó que el referéndum de Crimea "no es válido" y llama a resolver pacíficamente la crisis desatada tras su anexión a Rusia.
Este texto no vinculante fue aprobado por 100 votos a favor, 11 en contra y 58 abstenciones, un apoyo a la resolución más contundente de lo esperado.
Con estas circunstancias, el Dow Jones cerró la sesión con catorce empresas del lado de las pérdidas y dieciséis del lado de las ganancias.
En un día en el que el petróleo de Texas subió más de un dólar y alcanzó su mejor precio en casi tres semanas, la petrolera Exxon Mobil lideró los números verdes, con un 1,63 % de ganancias, seguida de dos operadoras telefónicas, Verizon (1,45 %) y la operadora AT&T (1,01 %), las únicas tres empresas que superaron el punto porcentual de ascenso.
Al otro lado de la tabla los descensos fueron protagonizados por una de las grandes ganadoras de ayer, IBM (-1,45 %), y otras dos tecnológicas: Cisco (-1,34 %) y Microsoft (-1,08 %).
Además del descenso en lo tecnológico, los valores financieros tampoco vivían una buena jornada, con un descenso del sector del 0,13 %, y las acciones de Citigroup bajando con fuerza el 5,40 % un día después de que la Reserva Federal (Fed) rechazara sus planes de dividendos y recompra de acciones dentro de los test de resistencia que lleva a cabo anualmente.
Por su parte, Bank of America cayó el 0,99 % tras acordar el miércoles pagar una multa de 9.300 millones de dólares al regulador federal que absorbió y administra los bancos hipotecarios Fannie Mae y Freddie Mac por su papel en la crisis de las hipotecas "basura".
Mientras, las acciones de King Digital Entertainment, creadora entre otros del popular videojuego "Candy Crush Saga", caían otro 2,68 % y se cambiaban a 18,49 dólares en su segundo día de operaciones en la Bolsa de Nueva York (NYSE).
En Nasdaq, Facebook volvió a las ganancias y recuperó un 0,97 % después de las pérdidas acumuladas tras la compra de Oculus, mientras que las caídas las protagonizaba BlackBerry (-1,20 %) y Google (-1,56 %).
En otros mercados, el petróleo de Texas subía a 101,28 dólares el barril, el oro bajaba a 1.292,1 dólares la onza, la rentabilidad de la deuda estadounidense a diez años retrocedía al 2,687 % y el dólar perdía terreno ante el euro, que se cambiaba a 1,3741 dólares.