por Fenix » Lun May 19, 2014 3:44 pm
09:16 CET Deutsche Bank (DBK GY) -2,2%, tras aumento de capital de 8.000 mlns EUR.
Rio Tinto (RIO LN) -2,3%, después de la compañía accediera a firmar un acuerdo de inversión para su proyecto estancado de mineral de hierro en Guinea.
Dudas que hacen daño, pero nada grave
Más razones para que el BCE actúe
Lunes, 19 de Mayo del 2014 - 9:20:31 CET
LA SEMANA PASADA coincidieron el jueves pasado tres hechos que dejaron al mercado con una sensación de inseguridad nada despreciable: (i) Publicación de un PIB 1T europeo por debajo de expectativas: +0,9% vs +1,1% esperado. Sin embargo, es preciso tener presente que el trimestre previo (4T’14) fue tan sólo +0,5% (¡y en aquel momento parecía más que suficiente!), de manera que, analizado fríamente, supone doblar el ritmo de crecimiento y la cifra no sería tan mala como se interpretó.
Podría tratarse de un ajuste de expectativas y no algo más grave que eso. (ii) Publicación en EE.UU. de un Grado de Utilización de la Capacidad Productiva en retroceso (78,6% desde 79,2%), de una Producción Industrial contrayéndose (-0,6% vs +0,9% anterior); (iii) Rumores confusos sobre un posible endurecimiento de la fiscalidad aplicable a las plusvalías sobre los bonos griegos (soberanos) que, aunque fueron desmentidos, generaron el ruido suficiente como para castigar a unas bolsas que ya venía sufriendo por el tono decepcionante de la macro.
El viernes el mercado se estabilizó, más o menos, pero el daño causado dejará cicatrices que tardarán algunos días en cerrarse: las bolsas habían retrocedido bruscamente (Ibex -2,3%, ES-50 -1,5%, etc), el euro depreciado hasta casi 1,370 y la TIR de los bonos españoles e italianos situado por encima de la frontera psicológica del 3%... El golpe fue tan rápido y brusco que dejó algo tocado el sentimiento del mercado y condicionado hacia una mayor prudencia el arranque de esta semana.
ESTA SEMANA partimos afectados por el efecto arrastre negativo del final de la semana pasada, aunque el viernes la situación se estabilizase. Pensamos que lo ocurrido no es grave, sino más bien que responde al ajuste que debe realizar el mercado respecto de sus propias expectativas al comprobar que la mejora de la Eurozona no será ni tan rápida, ni tan intensa como había venido descontando. Esto no es grave, sino más bien una corrección de excesos (en expectativas).
Sin embargo, es preciso tener en cuenta que está sucediendo más o menos lo que habíamos estimado: en este nuevo ciclo expansivo que comenzamos, la Eurozona contará con dos locomotoras principales (Alemania por lo que ya ha hecho y España por lo que está haciendo) y dos economías que probablemente decepcionarán (Francia e Italia) debido a la ausencia de reformas suficientes. El mercado había estimado que la recuperación sería más bien homogénea, pero eso no va a suceder. El choque de las expectativas con la realidad es lo que ha causado el daño reciente al mercado. Por eso creemos que este es un asunto a vigilar, pero no causante de una preocupación excesiva. Se trata más bien de un ajuste de expectativas que llega en un momento de nuevos máximos en Wall Street y cuando las dudas que genera el debilitamiento de los emergentes aún no han podido disiparse (porque aún no se han publicado cifras que permitan estar más tranquilos).
Esto da como resultado un mercado que, a corto plazo, estará menos dispuesto que antes a acoger las noticias con entusiasmo y optimismo. Es posible que esto sea más sano… teniendo claro, como creemos tener nosotros, que el ciclo expansivo está en marcha - también en el UEM - y que el contexto seguirá siendo pro-riesgos durante algún tiempo, puede que incluso un par de años más.
En base a esa perspectiva nosotros extraemos dos conclusiones prácticas, aplicables también al corto plazo: (i) La primera, que recortes sin razones nuevas que los justifiquen deben interpretarse más bien como oportunidades para construir cartera a precios algo más atractivos y de cara a un ciclo que seguirá siendo expansivo, aunque puede que “menos rápidamente expansivo” de lo que una parte importante del mercado esperaba, sobre todo en la Eurozona. (ii) La segunda, ahora empieza a ser más probable que antes que la recuperación del inmobiliario se acelere, por exclusión.
Siendo el flujo de fondos igualmente potente, si la confianza en las bolsas disminuye un poco (insistimos desde principios de año en que los avances serán menos exuberantes en 2014) y los bonos no parecen baratos, parece probable que la actividad empresarial y el inmobiliario reciban más flujo de fondos del que esperaban este año.
Una vez realizado el planteamiento más estratégico, aunque sea de perspectiva semanal, ¿qué tenemos de específico esta semana? Hoy hablan Weidmann (Buba y BCE), Merch (BCE) y Coeuré (BCE) y podrían afinar o corregir algo más el mensaje de Draghi con respecto a adoptar alguna medida de estímulo adicional en su reunión de junio. La debilidad del PIB europeo le ha proporcionado un argumento adicional para moverse, si es que necesitase argumentos nuevos y tangibles. El miércoles se publicarán las actas de la Fed, que podrían aportar un enfoque más “dovish” sobre el interior de la institución. El jueves temprano sale en China el PMI Manufacturero según HSBC, que podría repuntar 2 décimas, hasta 48,3 y, además, el Indicador Adelantado americano, probablemente no demasiado sólido (+0,3% esperado vs +0,8% anterior). Finalmente, el viernes tendremos un IFO alemán que debería debilitarse, sobre todo en su componente de Expectativas, igual que sucedió con el ZEW la semana pasada, y la revisión de ratings de Grecia (Fitch; ahora B-), España (S&P; BBB-), Frnancia (Moody’s) y R.U. (ídem).
En términos globales, estos datos no hará más daño al mercado. Sí puede surgir cierto temor al auge de los partidos euroescépticos en las elecciones europeas después de lo ocurrido en Grecia (ver entorno). Aún así, puede que el saldo neto sea ligeramente positivo si el enfoque de las agencias de rating fuera algo mejor.
Las últimas dudas han hecho daño al mercado, pero lo más probable es esta semana la situación se estabilice, consolidándose las TIR de los bonos italianos y españoles por debajo del 3% de nuevo, avanzando algo el euro y las bolsas lateralizando o tal vez incluso rebotando testimonialmente. Bankinter