por admin » Jue Jun 25, 2015 2:24 pm
Las automotrices de Asia se llevan por delante a las de EE.UU. en ganancias
Una fábrica de SAIC-GM-Wuling Automobile en Qingdao, China. AGENCE FRANCE-PRESSE/GETTY IMAGES
La capacidad de los fabricantes de autos estadounidenses para financiar costosos requisitos de tecnología y emisiones con sus ganancias será puesta a prueba por un grupo más amplio de fuertes competidores que por primera vez incluyen a automotrices indias y chinas más rentables.
Las principales automotrices en China e India generaron 37,5% más ganancias, excluyendo dividendos preferentes, que sus contrapartes estadounidenses en el año fiscal 2014, sumándose así a las empresas de autos europeas y japonesas en superar las ganancias de las tres grandes de Detroit — General Motors, GM -1.08% Ford y Chrysler—, informó AlixPartners LLP, una firma de consultoría que cuenta con un departamento para el sector automotor global. Su panorama del sector para 2015, publicado el martes, muestra que las automotrices emergentes asiáticas el año pasado generaron márgenes de alrededor del doble de los de General Motors Co., Ford Motor Co. F -0.45% y la división Chrysler de Fiat Chrysler Automobiles FCA.MI -0.39% NV.
El ascenso de las potencias asiáticas —principalmente la india Tata Motors Ltd. 500570.BY +0.33% y las chinas SAIC Motor Corp. 600104.SH -3.96% y Great Wall Motor Co.— representa la más reciente mella del otrora dominio global de Detroit. En los últimos 15 años, las automotrices estadounidenses pasaron de producir más de 60% de las ganancias de las automotrices a nivel mundial a generar alrededor de 17%, apuntó la consultora.
La tendencia plantea dudas sobre la competitividad global de GM, Ford y Fiat Chrysler en las vísperas de negociaciones laborales con el sindicato United Auto Workers y en medio de una enérgica campaña por parte del presidente ejecutivo de Fiat Chrysler Sergio Marchionne para consolidar la industria. El mercado estadounidense se encuentra en camino a vender 17 millones de vehículos livianos en 2015, el mejor año en más de una década, pero Detroit necesita mejores retornos para desarrollar autos que se conducen solos y sistemas eléctricos de propulsión y para defenderse de nuevos competidores como Google Inc. GOOGL -0.15% y Tesla Motors Inc. TSLA +1.78%
Aunque que las ventas estadounidenses fueron muy buenas en 2014, el año también tuvo retos que redujeron las utilidades. Las automotrices de Detroit afrontaron fuertes gastos por llamados a revisión. Además, los fabricantes de autos globales con amplia exposición han recibido fuertes golpes por los descensos económicos en Sudamérica y Rusia. General Motors, Ford, Fiat Chrysler y una serie de otras automotrices europeas tienen grandes operaciones de ventas en Brasil y otros mercados de Sudamérica, y muchas de esas divisiones perdieron dinero en 2014.
“Esto apunta a un nuevo orden mundial”, afirmó el director gerente de AlixPartners Mark Wakefield en una entrevista. Dijo que las automotrices deben ganar más dinero que cuando Detroit dominaba ya que “necesitan invertir en tecnologías que no existían en el presupuesto hace 10 o 20 años”.
Muchas empresas de autos están acelerando para desarrollar autos más seguros capaces de conducir por si solos, aunque quizás los productos no lleguen a ser económicamente viables en algunos años. En una presentación reciente, Marchionne anotó que los principales fabricantes de autos gastaron más de 100.000 millones (US$114.000 millones) para desarrollar productos en 2014 y anticipa que ese ritmo continúe.
La mayoría de las automotrices dicen que están aumentando sus gastos para cumplir con requisitos regulatorios y mantener su relevancia tecnológica.
Marchionne, líder de Fiat Chrysler, está motivando a GM y otras automotrices a considerar asociaciones o una fusión para invertir de manera más eficiente en el futuro. A GM no le interesa una combinación, pues dice que es lo suficientemente grande para afrontar los desafíos y que las asociaciones que ya tiene —incluyendo una operación conjunta con la china SAIC— son suficientes.
Aun así, las automotrices japonesas como Toyota Motor Corp. 7203.TO -0.21% , y las empresas europeas de autos lujosos, incluyendo BMW AG BMW.XE +0.44% , arrojan la mayor parte de las ganancias del sector. Por tanto, se considera que las automotrices no estadounidenses tienen una mejor capacidad para cumplir con las próximas regulaciones de ahorro de combustible y para tener éxito en una costosa carrera de tecnología, a pesar de que el mercado de autos de EE.UU. figura entre los mayores y más lucrativos.
Detroit ha gozado de una serie de años rentables tras la crisis financiera de 2008 que obligó a GM y Chrysler a someterse a reestructuraciones gestionadas por el gobierno. Los aproximadamente US$78.000 millones en ingresos obtenidos entre 2010 y 2014 se aproximan a los US$82.000 millones embolsados entre 1995 y 1999: un periodo de AlixPartners denomina de la “Era Dorada” de la ciudad de Detroit.
Sin embargo, las automotrices estadounidenses gastaron mucho dinero en la década que culminó con las bancarrotas, lo que permitió a Europa y Japón a tomar ventaja. Durante esa Era Dorada, los fabricantes de autos asiáticos y europeos registraron US$48.000 millones en ganancias, o alrededor de la mitad de las ganancias de Detroit; esa cifra ascendió a US$329.000 millones en el lapso de 2010 a 2014.
En cambio, las automotrices generaron en conjunto US$96.000 millones en ganancias a nivel global el año pasado, estima Wakefield, de AlixPartners. Alrededor de US$11.000 millones de esa cifra fue generado por las 24 principales empresas en China e India; las automotrices de Detroit consiguieron alrededor de US$8.300 millones colectivamente en 2014, o ligeramente más que los US$8.000 millones que Tata, SAIC y Great Wall se llevaron colectivamente durante el mismo periodo.
Sean McAlinden, economista principal en el Centro para Investigación Automotriz con sede en Ann Arbor, Michigan, apuntó que las automotrices de EE.UU. “no ganan suficiente dinero. Ganamos poca cosa en términos de lo que tenemos que invertir”, lo que permite que rivales más rentables gasten más y agilizan su desarrollo de nuevos modelos.