China y la geopolítica tumban a las Bolsas: Bienvenidos a 2016
El Ibex se deja un 2,42% y Euro Stoxx 50 un 3,28%
Lunes, 4 de Enero del 2016 - 17:39:53
Los mercados de acciones europeos sufrieron un duro revés el primer de negociación del año ante las crecientes tensiones en el Medio Oriente y una oleada de ventas que sacudió al mercado chino. Eso impulso a los activos refugio como los bonos "core" de la eurozona y el oro.
Las acciones chinas tuvieron que cerrar prematura después de alcanzar el límite de pérdidas del 7 por ciento tras conocerse que la actividad fabril de China se contrajo por décimo mes consecutivo en diciembre y el fin de las prohibiciones de ventas del pasado viernes.
Las tensiones entre Irán y Arabia Saudita también alentaron a los inversores a buscar seguridad en los mercados de bonos. Arabia Saudita, el mayor exportador de petróleo del mundo, rompió relaciones diplomáticas con Irán el domingo en respuesta a la toma de su embajada en Teherán. Las tensiones entre los dos se intensificaron después de la ejecución en Riad de un clérigo chiíta el fin de semana.
"En general, los movimientos todavía no son de pánico y los mercados no están seguros de qué hacer con esta tensión en Oriente Medio y si va a seguir aumentando", dijo el estratega de KBC Piet Lammens.
Los inversores están preocupados por el crecimiento global, mientras las cifras del sector manufacturero chino pueden no indicar plenamente lo rápido que China se ha estado desacelerando, dijo Paul Mendelsohn, estratega jefe de inversiones de Windham Financial Services.
"Los descensos del 7 por ciento en China y el cierre del mercado, junto con Arabia Saudita, están provocando que los inversores recapaciten sobre sus estimaciones de crecimiento y el riesgo geopolítico", dijo Mendelsohn.
Los futuros del crudo subieron hasta un 4 por ciento ya que las tensiones Arabia-iraníes plantearon temores sobre la seguridad de los suministros de petróleo de Oriente Medio, que se estima contienen alrededor de la mitad de las reservas probadas de petróleo del mundo. Sin embargo, los movimientos se suavizaron por la tarde y ahora los avances no alcanzan el punto porcentual.
La reanudación del programa de compra de bonos del Banco Central Europeo después de una pausa temporal por las vacaciones de Navidad también apoyó el mercado de bonos de la zona euro.
El rendimiento de los bonos alemanes a dos años cayó a un mínimo de dos semanas en el -0,356 por ciento. Los rendimientos de los bonos alemanes a cinco años también cayeron a un mínimo de dos semanas en el -0.082 por ciento mientras que los rendimientos a 10 años cayeron 6,4 puntos básicos al 0,57 por ciento.
Los rendimientos del Tesoro estadounidense también bajaron, con la rentabilidad del 10 años bajando 4,8 puntos básicos en el 2,22 por ciento.
Analistas dijeron que el buen comportamiento relativo de los bonos alemanes contra sus pares de Estados Unidos se explica por la evolución de los mercados de divisas que volvieron a enfocarse en la baja inflación en la zona euro.
El banco central de China, por su parte, estableció el cambio de referencia del yuan en un mínimo de cuatro años y medio.
Una moneda china más débil reduce el valor de las importaciones chinas y suma riesgos de deflación en la zona euro, donde el año pasado el BCE se embarcó en un programa de estímulo monetario agresivo para cumplir el objetivo de inflación de cerca del 2 por ciento.
El apetito por los activos refugio benefició al oro que se disparó un 1,7 por ciento, camino a su mayor alza diaria en un mes.
El BCE debería replantearse su objetivo de inflación
Lunes, 4 de Enero del 2016 - 18:00:00
Con el Banco Central Europeo en camino de no alcanzar su objetivo de inflación por cuarto año consecutivo en 2016, las autoridades están en medio de un debate no deseado sobre su indicador clave.
Los responsables políticos insisten en que se mantienen en su mandato de mantener la tasa anual de inflación en poco menos del 2 por ciento en el mediano plazo incluso aunque este objetivo sea cada vez más difícil. La débil recuperación económica, el declive demográfico y los alicaídos costos de energía sugieren que no veremos ese nivel de crecimiento de precios antes de finales de 2017.
Mientras que los académicos y economistas comienzan a argumentar que la orientación de precios en un entorno global de desinflación es un juego perdido, hay pocos indicios de un replanteamiento manifiesto en el BCE. En lugar de ello, los funcionarios del presidente, Mario Draghi, están subrayando la posibilidad de más estímulos, mientras que sutilmente mejoran el peso dado a las medidas de inflación que eliminan el impacto del petróleo.
"Como institución, el BCE valora su credibilidad más que nada por lo que no es probable que vayan a cambiar algo formalmente", dijo Frederik Ducrozet, economista de Banque Pictet & Cie en Ginebra. "Dicho esto, en el contexto de los bajos precios del petróleo la atención se centrará en gran medida en la inflación subyacente y eso podría significar una especie de cambio sin previo aviso en su función de reacción".