El Premio Nobel en contra de los agoreros del Brexit
Carlos Montero
Martes, 5 de Julio del 2016 - 19:30:00
Muchos inversores se han mostrado sorprendidos por el rebote de las bolsas tras las caídas que produjo el resultado del referéndum británico. En algunos indicadores se ha recuperado ya todo lo perdido. En otros la caída no es ni mucho menos tan fuerte como los comentarios apocalípticos de un primer momento sugerían. ¿Por qué esta tenue reacción?
El premio nobel Paul Krugman se ha pronunciado claramente en contra de los comentarios excesivamente pesimistas a raíz del Brexit. Krugman cuestiona en sus últimos artículos a aquellos economistas que creen que la salida del Reino Unido de la Unión Europea provocará un shock negativo en la demanda.
“Estoy realmente confundido acerca de este consenso y de donde viene, dado que no hay nada en los modelos macroeconómicos estándar que digan que una mala política por el lado de la oferta en el largo plazo, tenga un efecto necesariamente negativo en el lado de la demanda en el corto plazo”, afirmaba Krugman que añade:
“Me preocupa que el aparente consenso entre los economistas sea en cierto sentido político más que analítico. Se defiende que la libertad de comercio fuera de Europa es mala, pero sin tener en cuenta cuales son los argumentos de por qué exactamente es mala.
He recibido varias respuestas (afirma Krugman) bien pensadas de economistas que respecto, argumentando en particular los efectos de la incertidumbre inducida por el Brexit. La esencia de esta argumentación es así: En este momento, las empresas no saben cuál será la relación del Reino Unido con Europa. Como será de estrecha. Así que tiene sentido para ellas posponer las inversiones hasta que la situación se aclare.
Krugman afirma que es un argumento interesante y defendible, pero hace tres preguntas sobre el mismo:
La primera: ¿Este argumento subyace en las nefastas previsiones que se han realizado post-Brexit? Mi impresión es que muy poca gente que lee o ve las noticias está escuchando esto. Lo que escuchan está mucho más cercano a que el aumento de incertidumbre es igual al aumento de la probabilidad de que pasen cosas malas. Es decir, este argumento es mucho más matizado y sutil que todo lo que anteriormente se ha oído en esta discusión.
La segunda: ¿Este argumento no implica un auge en la inversión más adelante, una vez que la incertidumbre se resuelva en uno u otro sentido? Es decir, una vez que el primer ministro y el presidente hayan diseñado la desaparición de la pertenencia a la UE, no habrá razón para esperar, y toda la inversión que se ha retrasado se recuperará. Pero no he oído a nadie argumentando que el efecto contractivo del Brexit será seguido por un auge de compensación una vez que las cosas se calmen.
La tercera: ¿Este argumento no sugiere esencialmente los mismos efectos en cualquier otra negociación política cuyo resultado final no se conoce? ¿Por qué no decimos que las posibilidades del TPP o TTIP son contractivas, porque las empresas tienen un incentivo para posponer las decisiones de inversión hasta que sepan si estos acuerdos suceden realmente? Nunca he oído a nadie argumentar esto.
Krugman finaliza esta reflexión sobre las críticas al Brexit señalando: Quiero señalar una vez más que no estoy tratando de defender el Brexit. Pero me preocupa que el impulso de la crítica haya dado lugar a una disminución del nivel intelectual.
Los mercados, por ahora, parecen estar dando la razón a Krugman.
Lacartadelabolsa
20:17 ConocoPhillips ST: resistencia principal a corto plazo en 46.9
Trading Central
Nuestro punto de rotación se sitúa en 46.9.
Nuestra preferencia:la caída se mantiene siempre que la resistencia se sitúe en 46.9.
Escenario alternativo: por encima de 46.9, objetivo 50 y 51.8.
En lo referente al análisis técnico, el índice de fuerza relativa (RSI) se encuentra por debajo de su zona de neutralidad de 50. El indicador de convergencia/divergencia de medias móviles (MACD) se sitúa por debajo de su línea de señal y es negativo.
Asimismo, la acción se sitúa por debajo de su media móvil de 20 y 50 días (se sitúa a 44.34 y 44.48 respectivamente).
Mucho ruido y pocas nueces
Santander Private Banking
Martes, 5 de Julio del 2016 - 20:32:00
La elevada incertidumbre política en el Reino Unido tiene visos de continuar por lo menos hasta septiembre. Con un Primer Ministro en funciones, que ya ha señalado que él no será el que inicie el procedimiento de salida del Reino Unido de la Unión Europea, resolver la crisis de liderazgo es tarea prioritaria.
En el seno del Partido Conservador, Boris Johnson, uno de los principales impulsores de la campaña a favor de la salida del Reino Unido de la UE, anunció que no se presentará a las primarias del partido. Así, todo apunta a que quedarían tres contendientes para la lucha por el liderazgo del Partido Conservador y, por tanto, para el puesto de Primer Ministro: Theresa May, Stephen Crabb y Michael Gove.
De los anteriores, May sería el candidato que más apoyos internos tendría, si bien desconocemos si Gove recogería parte de los apoyos de Johnson (hicieron la campaña por el Leave juntos). Todos han señalado que respetarán la voluntad popular e iniciarán el denominado proceso de salida del Reino Unido antes de que acabe el ejercicio (como apuntaba May en su último discurso: Brexit means Brexit), lo que aleja la posibilidad de un nuevo referéndum o un acuerdo por la puerta de atrás que permita que el Reino Unido permanezca en la UE.
En la esfera del Partido Laborista, a pesar de que Jeremy Corbyn perdió la moción de censura, ha señalado que no piensa dimitir, dado que conserva un fuerte apoyo entre los miembros y simpatizantes del partido. Dado el desorden y falta de liderazgo en el seno del Partido Laborista, se nos antoja muy complicada la posibilidad de que éstos fuercen unas elecciones anticipadas, planteando una candidatura pro-europea.
Por si esto fuera poco, acabamos de conocer la dimisión de Nigel Farage, líder del UKIP, uno de los miembros más prominentes de la campaña por la salida del Reino Unido. Mientras prosigue la incertidumbre política, el Reino Unido ya ha empezado a notar los efectos del referéndum vía el canal de confianza: el PMI del sector de la construcción (el primero que hemos conocido tras la votación) descendió en junio hasta su nivel más bajo desde 2009, y nuestra previsión es que el resto de indicadores adelantados empiecen a dar muestras de debilidad de manera inmediata.
Renta Variable. Neutral
A pesar de la positiva evolución semanal de las bolsas europeas y de la intensa reducción de la volatilidad hacia niveles próximos a la media histórica, consideramos adecuado mantener un posicionamiento cauto en renta variable, infraponderando la categoría en las carteras y optando por un posicionamiento próximo a la neutralidad sólo en las regiones más alejadas del epicentro del Brexit, como EEUU. Y es que, a pesar de las medidas de refuerzo de la liquidez introducidas por los principales bancos centrales, pensamos que la ausencia de visibilidad en el espectro político en el Reino Unido a lo largo de las próximas semanas primará sobre el resto de cuestiones del mercado.
Renta Fija. Negativo
El efecto depresor en la TIR de las curvas soberanas europeas al calor del fuerte movimiento de búsqueda de activos refugio acaecido en los últimos días, podría llevar al Banco Central Europeo a reconsiderar la necesidad de proporcionalidad de las compras en función de la clave de capital. Y es que más del 50% de la deuda alemana elegible para el PSPP - o el 25% del total de la deuda de la zona Euro - cotiza actualmente por debajo del tipo de la Facilidad Marginal de Depósito (FMD), mínimo al que el BCE puede realizar compras. El cambio podría ir en la dirección de realizar las compras teniendo en cuenta el volumen de deuda, por lo que países muy endeudados, como Italia (130% de deuda sobre PIB) o España (100%) podrían verse beneficiados, lo que sería un factor adicional explicativo de que la deuda a 10 años española cotice actualmente en el 1,15%, en la zona de los mínimos históricos de marzo-abril de 2015.
Divisas. Positivo
En las próximas semanas, podríamos esperar que la depreciación de la libra prosiguiera hasta acercarse a cotas de 0,85 EUR/GBP, en especial una vez el Banco de Inglaterra decida introducir estímulos adicionales (ampliación del QE) en las próximas reuniones de julio o agosto. Además, existe el riesgo de un deterioro aún mayor de la libra esterlina (hasta 0,90 EUR/GBP) a medio plazo, si las negociaciones comerciales del Reino Unido con la UE no cristalizan con suficiente velocidad. En paralelo, el USD y el JPY, podrían seguir actuando como divisas refugio.