por Fenix » Mar Jul 19, 2016 8:08 pm
18:00 EE.UU. no subirá tipos hasta 2018 afirma Morgan Stanley
La Reserva Federal de EE.UU. no será capaz de subir sus tipos de interés hasta 2018, según los estrategas de Morgan Stanley, porque el crecimiento económico no se lo permitirá.
"Creemos que el crecimiento global decepcionará en los próximos 12 meses -particularmente en los mercados desarrollados y EE.UU.", afirma Andrew Sheets de Morgan Stanley. Estima que el crecimiento en 2017 será del 1,5% frente al consenso del 2,3%
Morgan Stanley recomienda a los inversores que se mantengan sobreponderados en la renta variable de EE.UU. hasta que la Fed inicie la senda de subida de tipos.
19:10 UBS mantiene su recomendación de comprar Apple
Apple está en la mitad del año comercialmente más débil, donde los catalizadores positivos son menos probables. Los analistas UBS estiman que los ingresos en el primer semestre se sitúe en 41.600 millones de dólares, por debajo del consenso de 42.200 millones.
UBS implica que por el método de valoración por flujos de caja y ratios de valoración promedio de Apple tendría un objetivo en los 115 dólares. Las estimaciones de BPA serían:
2016e: 8,10$
2017e: 8,75$
2018e: 10,30$
¿Puede la crisis bancaria italiana dinamitar el conjunto de la UE?
Carlos Montero
Martes, 19 de Julio del 2016 - 19:30:00
Pasados los primeros efectos del referéndum británico, otros factores de incertidumbre están empezando a ganar protagonismo entre los inversores, la crisis bancaria italiana por ejemplo. Se estima que los bancos italianos presentan más de 350.000 millones de euros de deudas de dudoso cobro lo que les resta capacidad para generar nuevos créditos e impulsar la actividad económica del país.
Es un problema que viene de lejos. Cuando otros países como el Reino Unido, Irlanda y España tuvieron problemas con su sector bancario, aprovecharon para sanear las entidades con ayudas estatales y de la UE. Italia no lo hizo.
El objetivo era lícito; que los inversores, los accionistas y los tenedores de bonos pagaran la mala praxis de estas entidades. Por desgracia, como afirma Tim Wallace y Szu Ping Chan en The Telegraph, los hogares son los principales inversores de estos bonos bancarios, por lo que los particulares sufrirían unas pérdidas que en muchos casos no podrían asumir.
Al no hacer nada los tenedores de bonos han mantenido sus ahorros y a los bancos se les ha permitido hacer caso omiso de sus malos préstamos. Se salvó al país de un dolor en el corto plazo, pero los problemas financieros nunca se fueron, y amenazan con trasladarse al resto de la UE. ¿Por qué? Wallace y Chan lo explican de esta manera:
Si no se alcanza un compromiso entre Roma y la UE, y finalmente los tenedores de los bonos italianos (particulares en su mayoría como decíamos), tienen que asumir sus pérdidas, el anti europeísmo podría ganar muchos adeptos en Italia. Más si cabe que según las últimas proyecciones la economía italiana no volverá a su tamaño previo a la crisis hasta 2025. Es decir, Italia se enfrenta a dos décadas perdidas.
Esto sería difícilmente asumible por un sector bancario en muchas peores condiciones que sus homólogos europeos. La “deuda mala” en Italia podría representar el 18% del total de préstamos bancarios, respecto al 5% de los bancos franceses o el 1,5% de los británicos.
El problema político se añadiría a la situación económica. El primer ministro actual, Matteo Renzi, ya muy contestado, se enfrenta a importantes votaciones en el corto plazo. En caso de perderlas podría ser el fin de su carrera política. Las encuestas dicen que la opción preferida de los italianos en estos momentos es el partido euro escéptico Movimiento Cinco Estrellas. De alcanzar el poder, y realizar un nuevo referéndum para la salida de la UE, la incertidumbre que se generaría sobre el conjunto de la UE sería muy perjudicial. Es por ello por lo que la UE probablemente asuma el coste de la re-capitalización bancaria italiana. Del mal, el menos.
Lacartadelabolsa
19:45 El desempleo en la OCDE en el nivel más alto desde que se recogen datos
Los países de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) presentaron una tasa de empleo en el 1T2016 del 66,8%, un nivel máximo en la serie histórica desde 2008. Según informó la institución, la tasa de empleo aumentó tres décimas respecto del trimestre anterior, acumulando un total de doce trimestres de crecimiento. En términos interanuales la tasa creció un 0,8%. El número de empleados en el 1T2016 (entre 15 y 64 años) cerró con un total de 550 millones de personas.
En la Eurozona la tasa de empleo alcanzó en el 1T2016 el 65,1% (un incremento del 0,4% tasa interanual), su mayor ascenso trimestral en diez meses. La OCDE destacó también las tasas de aquellos países no pertenecientes a la Zona Euro como: EE.UU (69,3%) y Japón (74%) que experimentaron una subida del 0,4%; y Reino Unido (73,3%) y Canadá (72,5%) del 0,1%. Sin embargo la de México cayó tres décimas (60,9%).
La macro como ancla
Santander Private Banking
Martes, 19 de Julio del 2016 - 20:32:00
El ciclo viene echando un pulso en las últimas semanas a la variable geopolítica, ejerciendo como catalizador de las subidas recientes del mercado. No nos sorprende lo primero, puesto que era uno de los pilares de nuestra estrategia pre-Brexit: que la actividad económica global iba a cobrar tracción en torno al ecuador del ejercicio, liderada por EEUU, con ramificaciones favorables en la región emergente (especialmente Asia y LatAm).
Algo más sorprendente es lo segundo, dado que el entorno geopolítico sigue caracterizado por una complejidad sustancial, y donde las ganancias de visibilidad no van a llegar de forma inmediata, sobre todo en lo que se refiere a la relación futura entre el Reino Unido y la Unión Europea. Por tanto, pensamos que la volatilidad de momento no se va a ir de vacaciones, si bien hay que valorar en positivo que el ciclo exhiba algo más de músculo. Músculo que empezará a ponerse a prueba esta semana con las primeras referencias adelantadas de confianza empresarial en Europa correspondientes al mes de julio, ya impactadas por el Brexit.
Por el momento, los datos de actividad en EEUU de cierre del 2T16 han mostrado una tracción notable, especialmente los de consumo privado a través de las ventas minoristas de junio, variable que, dentro del registro de PIB abril-junio, podría avanzar cerca de un 3% anualizado (equivale al 70% del PIB). Por su parte, la apuesta que venimos realizando en los últimos dos años por un proceso de aterrizaje suave de la economía china sigue vigente.
Los datos contemporáneos de actividad así lo corroboran. La segunda economía del mundo se expandió un 6,7% interanual en el segundo trimestre del ejercicio, estable frente al período de enero a marzo y levemente mejor de lo estimado (6,6%). Los esfuerzos gubernamentales por estabilizar el ciclo siguen dando sus frutos: el Ejecutivo aumentó el gasto en un 19,9% en junio, acelerándose respecto del avance de un 17,6% de mayo. ¿Irá el ciclo económico de China a más en la segunda mitad del año? Probablemente no. A pesar de que las ventas minoristas aumentaron un 10,6% interanual en junio (por encima del 10% previsto), el crecimiento de la inversión en activos fijos se desaceleró hasta un 9,0% en la primera mitad de 2016 frente al mismo período del año previo, una cifra inferior a las expectativas del mercado y su menor nivel desde marzo de 2000. En conclusión, las cifras chinas aportan dosis adicionales de tranquilidad en uno de los ya, cuasi perennes, focos de preocupación del mercado.
Renta Variable. Neutral
Una relativa prudencia debe seguir imperando en la aproximación al activo bolsa, al menos a corto plazo. La incertidumbre se refuerza, además de por los últimos acontecimientos en Turquía, por la intensa agenda de eventos de carácter geopolítico y sus potenciales implicaciones en materia de incertidumbre sobre crecimiento, comercio internacional, etc. Más allá de la reunión del G-20 a celebrarse en China los días 23-24 de julio (donde la atención de nuevo estará puesta en la capacidad de imprimir impulso a soluciones coordinadas en materia de estímulo fiscal), las numerosas citas electorales en diversos Estados miembros de la UE durante próximos trimestres son un claro foco de atención, en especial tras el Brexit, ante el auge generalizado de movimientos de carácter euroescéptico y/o nacionalista iniciado tras la crisis financiera global. Pero quizás, la principal cita a vigilar de aquí a final de año son las elecciones presidenciales en EEUU, a celebrarse el 8 de noviembre, donde las encuestas de opinión reflejan una ventaja nada confortable de la candidata demócrata (Hillary Clinton) sobre el republicano Donald Trump. Aunque no será hasta finales de mes, con la celebración de las convenciones republicana (18-21 julio) y demócrata (25-28 julio) cuando se substancie su candidatura de forma oficial, la cuenta atrás ya ha comenzado. Los inversores, por tanto, tienen por delante unos meses en los que la incertidumbre en EEUU probablemente irá siendo creciente.
Renta Fija. Negativo
El valor en el activo, aunque la volatilidad persista a corto plazo, no está en la duración de gobiernos OCDE. Crédito corporativo y deuda emergente menos apalancada a Europa, nuestras preferencias.
Divisas. Positivo
El movimiento de aversión al riesgo tras el referéndum en el Reino Unido llevó al USD a apreciarse frente al EUR. Desde entonces, mientras que el diferencial entre la deuda a corto plazo EEUU vs Alemania se ha ampliado, el USD no ha acompañado este movimiento y se ha depreciado ligeramente frente al EUR. Incluso en un futuro escenario de apetito por el riesgo más consolidado, esta divergencia observada en las últimas sesiones debería corregirse apoyada en un adelanto de las expectativas de subidas de tipos en EEUU por parte de un mercado excesivamente complaciente en nuestra opinión. Por tanto, seguimos previendo apreciación del USD frente al EUR, con objetivo inicial en 1,05.