por admin » Mié Dic 15, 2010 11:13 am
Turquía surge como una incipiente potencia automotriz
Por Joe Parkinson
ESTAMBUL—Turquía, casi nunca percibida como un centro global automotor, superará este año a la República Checa como el mayor fabricante de autos en Europa del Este y en la Europa emergente, sin tomar en cuenta a Rusia, de acuerdo con pronósticos de la industria.
Turquía está produciendo casi un tercio de vehículos más este año que en 2009, informó la Asociación de Fabricantes de Automotores, en un salto que muestra la fuerte recuperación de la economía del país luego de la crisis financiera global.
Las ventas de automóviles y de vehículos comerciales livianos en Turquía subieron 31% en los once primeros meses de 2010 en comparación con el mismo lapso de 2009, según cifras difundidas recientemente. Los fabricantes dicen que se ven en aprietos para poder satisfacer la demanda.
Reuters
Ford Motor, que ayuda a operar esta planta en Kocaeli, Turquía, expande sus alianzas en el país.
.De acuerdo con la firma de analistas IHS Automotive, esto coloca a Turquía en camino de producir 1,05 millones de vehículos este año, más que la República Checa o Eslovaquia, países que, impulsados por una mano de obra barata y capacitada, se convirtieron en las potencias automotrices de la Europa emergente, luego de integrarse a la Unión Europea en 2004.
El boom automotor de Turquía es un claro ejemplo de la creciente confianza internacional del país, dice Ali Pandir, presidente ejecutivo de Tofas, el principal fabricante turco del sector. Con una economía que se expandió tan rápido como la de China en el segundo trimestre del año, los políticos y las empresas del país están expandiendo sus relaciones en Medio Oriente y África, pese a las tensiones que esto causa con Washington o la Unión Europea.
"Turquía se está desarrollando para ser un centro de producción de autos competitivo a nivel global, en buena medida sin llamar mucho la atención. Tiene un enorme mercado interno y el gobierno parece estar reformando la economía de una manera que los inversionistas encuentran atractiva, por lo que el crecimiento probablemente se acelerará", señala John Wormald, director de Autopolis, una empresa consultora.
Las exportaciones de automóviles están en auge. Siete de cada 10 vehículos ensamblados en Turquía son exportados y parte importante de la expansión se concentra en Medio Oriente y el norte de África, lo que ayuda a compensar la menor demanda de la Europa Occidental en crisis, de acuerdo con datos de la asociación de fabricantes. La industria, que factura US$22.000 millones, emplea a más de 230.000 trabajadores y representa 20% de las exportaciones turcas, de acuerdo con Deloitte, una empresa de consultoría.
La china Chery Automobile Co. se comprometió el mes pasado a construir en Turquía una planta para producir autos para el mercado europeo. Ford Motor Co. y los socios locales de Renault SA están expandiendo sus operaciones. En el caso de Renault, la automotriz francesa se comprometió a construir algunos de sus nuevos autos eléctricos Fluence en Bursa, al sur de Estambul.
Aun así, la industria automotriz turca enfrenta obstáculos. No hay marcas locales y los impuestos a las ventas de vehículos y la gasolina son muy altos, lo que durante mucho tiempo ha deprimido la demanda. Los impuestos representan 89% del precio de un Ford Mondeo, mientras que para un auto de lujo como un Ferrari suben a 112%.Por ahora, no hay señales de que el gobierno vaya a bajar estos impuestos.
Sin embargo, otras tendencias son auspiciosas. Los turcos de clase media se han enriquecido rápido en los últimos años. El Producto Interno Bruto per cápita era de US$2.900 en 2001, más bajo que el de México pero se ha más que cuadruplicado, hasta llegar a US$13.905 en 2009, según cifras del Banco Mundial.