Rusia presenta una nueva cara a los mercados de energía
Por Guy Chazan
Rusia ha asumido un papel inusualmente cooperativo en la crisis nuclear de Japón, mostrándose deseoso de mitigar las tensiones en los mercados globales de gas natural después de años de ser criticada por usar sus reservas de energía como arma política.
El fin de semana, el primer ministro Vladimir Putin dijo que OAO Gazprom, de Rusia, podía enviar más gas natural a la Unión Europea para permitir que los cargamentos rumbo a la UE de gas natural licuado sean desviados a Japón, que tuvo que cerrar buena parte de su capacidad de energía nuclear tras el terremoto del 11 de marzo.
Pero los analistas dicen que no está claro si los clientes europeos en verdad quieren más gas ruso, que está vinculado con el precio de petróleo y es mucho más caro que las importaciones de GNL de lugares como Qatar.
La reputación de Rusia como exportador de energía confiable se vio muy dañada por una serie de disputas de precios con Ucrania, que causó cancelaciones de entregas de gas ruso a Europa en medio del invierno. Moscú fue acusado entonces de usar sus riquezas de gas natural para presionar a sus vecinos.
Pero tras el terremoto que dañó la planta de energía nuclear Fukushima Daiichi de Japón y hundió el país en una crisis nuclear, Rusia ha ofrecido cuotas a compañías japonesas en yacimientos de gas natural en Siberia, ha promovido una propuesta de un "puente de energía" que llevaría electricidad generada en Rusia mediante un cable submarino a Japón, y dijo que estaba dispuesta a incrementar los suministros de gas a Europa de manera de librar GNL para Japón. El anuncio fue parte de intentos de Rusia por posicionarse como una especie de Arabia Saudita del gas natural, capaz de proveer capacidad variable a último momento para estabilizar mercados.
Paolo Scaroni, jefe ejecutivo de la compañía italiana de petróleo y gas ENI SpA, dijo que la crisis en Japón y el conflicto en Libia, que causaron un agudo descenso en las exportaciones de petróleo y gas del país de África del Norte, fortalecerían la posición de Rusia en mercados europeos, como también la de otros grandes exportadores de gas por vía de gasoducto. Los acontecimientos en Japón y Libia "significa el envío a Europa de más gas mediante gasoducto de los tres tradicionales proveedores: Argelia, Rusia y Noruega", dijo en una entrevista.
Italia pidió a Gazprom a fines de mes que aumente las entregas de gas de 30 millones de metros cúbicos por día a 48 millones de metros cúbicos después de que ENI cerró un gasoducto clave que lleva gas natural por debajo del Mar Mediterráneo de Libia a Italia.
Los analistas dicen que la crisis en Japón, que ha socavado la confianza en la energía nuclear en todo el mundo, en general apuntala la demanda global de gas. China, India y otros han dicho que necesitarán examinar su estrategia nuclear de largo plazo, y Alemania ha cerrado siete de sus reactores nucleares más viejos. Un análisis de Deutsche Bank reveló que si tan solo se cerrara 10% de las plantas de energía nuclear en todo el mundo debido a inquietudes en materia de seguridad, el mundo necesitaría otros 7.000 millones de pies cúbicos al día de gas natural, un aumento de 2,3% respecto de los niveles de consumo de 2010. Eso podría causar una presión alcista en los precios de venta al contado del gas, especialmente en la región de Asia Pacífico, dicen analistas.
Pero Jonathan Stern, director de investigación de gas en el Instituto de Oxford para Estudios de la Energía, dijo que estaba escéptico de que Europa querría aumentar sus importaciones de gas ruso.
"Los rusos están desesperados por enviar más gas a Europa, pero están insistiendo en un precio vinculado con el petróleo", dijo.
Un portavoz del brazo de exportación de Gazprom se negó a hacer comentarios sobre cómo los acontecimientos en Japón y Libia afectarían el mercado del gas. Pero dijo que eran "claramente positivos para todos los productores de gas, incluso Gazprom por supuesto".
"En lo que va de este año, hemos suministrado menos de lo estipulado en contratos, pero tenemos la capacidad de aumentar los suministros a Europa", dijo el portavoz. Pero reconoció que ninguno de los clientes europeos de Gazprom fuera de Italia hasta ahora hubiera pedido mayores entregas de gas.
—Jacob Pedersen colaboró para este artículo.