por admin » Mar Abr 05, 2011 2:21 pm
El regreso de los grandes acuerdos corporativos
Por Gina Chon
A lo largo de industrias y países, el mercado de fusiones y adquisiciones ha vuelto con fuerza. Las transacciones y los acuerdos propuestos que han surgido tan sólo en las últimas horas incluyen la compra de Texas Instruments de National Semiconductor por US$6.500 millones; la oferta no solicitada por US$6.500 millones de una minera estatal china por una firma canadiense-australiana; el trato de KKR por US$2.400 millones para adquirir una filial de Pfizer; y un consorcio de compañías metalúrgicas japonesas que están pagando US$680 millones por la estadounidense Arco Aluminum.
Hasta el momento, las compañías en todo el mundo han anunciado acuerdos por US$784.100 millones, frente a los US$637.900 millones acumulados en el mismo período de 2010, según los datos de Dealogic. Se trata del mayor volumen hasta la fecha desde 2007, cuando se anunciaron acuerdos por US$1,1 billones (millones de millones) en idéntico lapso.
.Los pactos ilustran la confianza renovada de las empresas y firmas de capital riesgo —muchas de ellas en países en vías de desarrollo de Asia— que cuentan con US$2,4 billones en efectivo. En momentos en que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) mantiene bajas las tasas de interés, la financiación está entre las más baratas de la historia. Las fusiones también reflejan el desencadenamiento de años de demanda acumulada, por cuanto las fusiones en todo el mundo prácticamente se paralizaron a finales de 2007.
Más aun, los accionistas están tendiendo a recompensar a las compañías que hacen adquisiciones, hacienda subir las acciones tras los anuncios de acuerdos.
Todo esto ha ocurrido mientras se acumula la evidencia de que las fusiones a menudo fracasan. De todos modos, un cambio de mentalidad ha llevado a las empresas a salir de compras, aunque sólo sea por temor a que un rival golpee primero. Tal vez no haya un mejor ejemplo de esta dinámica que la industria de los mercados financieros, donde siete empresas de todo el mundo, Estados Unidos, Alemania, Canadá, Inglaterra, Singapur y Australia, están inmersas en una batalla por el control de las bolsas mundiales.
Otro aliciente son los propios accionistas, que han tendido a premiar a las empresas que hacen las adquisiciones, elevando el precio de sus acciones después de los anuncios. Habitualmente, los accionistas castigan a las compañías que hacen grandes acuerdos, pero esta vez no ha sido así. Las acciones de Nasdaq OMX Group, por ejemplo, se dispararon 9% el viernes, después de que anunció una oferta no solicitada de US$11.300 millones por NYSE Euronext Group.
El director global de fusiones y adquisiciones del banco de inversión Lazard, Antonio Weiss, observó que apenas cuatro acuerdos anunciados en 2010 superaron los US$15.000 millones. En lo que va de este año, ya ha habido tres. El mayor fue la propuesta compra de AT&T de T-Mobile USA Inc. por US$39.000 millones.
China ha sido el tercer país más activo en materia de acuerdos transfronterizos, con un volumen que equivale a un tercio del de Estados Unidos y más de la mitad del correspondiente al Reino Unido, según Dealogic. Las compañías chinas han puesto la mira en compañías ligadas al petróleo y el gas natural, seguidas de las mineras y las químicas.
Uno de los movimientos más audaces de esa semana provino de Minmetals Resources Ltd. que anunció el lunes una oferta de US$6.500 millones por la canadiense-australiana Equinox Minerals Ltd. Minmetals es parte de un conglomerado minero chino estatal, cuyas incursiones previas en compañías canadienses fueron ampliamente criticadas en 2004 en ese país.
El estado de ánimo en Canadá ha cambiado significativamente desde entonces, a medida que los políticos perciben que los acuerdos con empresas chinas son una parte necesaria de la búsqueda de capital para realizar inversiones en nuevos recursos naturales. En Australia, la situación es menos clara. El país también está enfrentándose a una posible absorción de su principal mercado bursátil por parte de una compañía de Singapur.
A pesar de los sobresaltos de la economía japonesa, las compañías no han dejado de cerrar acuerdos. El lunes, Sumitomo Light Metal Industries anunció que encabeza un grupo que comprará por US$680 millones a Arco Aluminium, una empresa estadounidense que hoy pertenece a la británica BP PLC.
Las compañías y las empresas de capital privado también ven los próximos meses como una oportunidad, y muchas de ellas esperan que la inflación se acelere, perjudicando las tasas a las que se financian los acuerdos.
El lunes la farmacéutica Pfizer Inc. anunció la venta de su división Capsugel, que fabrica cápsulas duras, a Kohlberg, Kravis & Roberts (KKR) en un pacto valorado en US$2.380 millones. Otra firma de capital privado, Apax Partners, anunció la compra de los proveedores de software Epicor Software Corp. y Activan Solutions Inc. en acuerdos que bordearon los US$2.000 millones.